La Xunta creó el programa de protección de la salud para dar sanidad a los simpapeles a los que el Gobierno central retiró la asistencia. Cinco meses después de su entrada en vigor, colectivos como Médicos do Mundo o el Foro da Inmigración piden que se amplíe y facilite el plazo para inscribirse, porque solo se inscribieron 300 irregulares pese a que tres mil siguen yendo a los servicios sanitarios. Denuncian decenas de casos en los que niños y embarazadas encuentran atrancos, cuando en su caso está garantizada la asistencia.