Las dos mujeres de nacionalidad rumana que fueron arrestadas por la Policía Local de Vitoria, y en cuyos domicilios hallaron 38,9 gramos de cocaína, una báscula de precisión y 3.000 euros en billetes, trabajaban en un bar de la calle Reyes de Navarra frecuentado por poteadores del barrio de Zaramaga de cierta edad. Una era la responsable del local, mientras que la otra ejercía como camarera. Las sospechas de los agentes municipales, quienes realizan un seguimiento periódico de distintos establecimientos públicos para evitar la venta de estupefacientes a pie de barra, comenzaron hace unos dos meses, cuando constataron un tipo de clientela que no encajaba en el perfil habitual del establecimiento hostelero.
Según fuentes municipales, los jóvenes que acudían puntualmente a este local y salían al poco rato de entrar contrastaban mucho con la gente mayor que lo alterna y suele quedarse a echar unos potes. Por ello, la Guardia urbana decidió montar un dispositivo de vigilancia para controlar el bar y los desplazamientos de una de las imputadas hasta un domicilio, donde supuestamente recogía las dosis de droga preparadas para su venta. Las detenidas fueron puestas a disposición judicial.
Robo en el centro del Carmen
La Policía Local arrestó además sobre las 00.15 horas de ayer a un joven de 18 años por un delito de robo con fuerza en el Centro de Educación Permanente de Adultos Nuestra Señora del Carmen, ubicado en la Avenida de Judimendi. Una patrulla uniformada acudió a este complejo formativo alertada por la alarma de seguridad. Tras reconocer el lugar, los agentes constataron que uno de los cristales estaba roto y el interior de un despacho presentaba indicios de haber sido revuelto y desvalijado.
Sin embargo, el edificio estaba vacío, por lo que se intensificó la búsqueda en la zona ajardinada del centro, donde localizaron al chico escondido junto al muro. Los agentes le apresaron y recuperaron los efectos robados que portaba: varias memorias ‘drive’, un lector de tarjetas, un teléfono móvil, un cable USB y un adaptador de tarjetas de memoria. Además del material electrónico, la Guardia urbana también le ocupó una cartera con llaves. Todos estos objetos fueron reconocidos como propios por personal educativo. El detenido fue trasladado al juzgado durante la tarde de ayer.
Por otra parte, el peatón de 43 años que fue atropellado por el tranvía alrededor de las 14.55 horas del lunes continúa ingresado en el hospital Santiago, donde ha sido intervenido quirúrgicamente por una fractura en la pierna. Al parecer, el afectado irrumpió en la plataforma tranviaria al paso del convoy de Abetxuko por el cruce de Portal de Arriaga con la calle Luis Olariaga. El conductor del metro ligero, «que activó la campana», según fuentes de Euskotren, no pudo frenar a tiempo y arrastró durante unos metros al peatón, quien fue atendido inicialmente por los bomberos en el lugar del accidente.
Asimismo, una camión de FCC propulsado con gas natural volcó lateralmente a las 19.36 horas del lunes en la confluencia de las calles Alibarra y Becolarra. La canalización de combustible sufrió una fuga en la zona de la grifería tras el siniestro, lo que demandó la intervención de los bomberos, quienes también rescataron a las 17.59 un trailer atrapado en la nieve a su paso por Mezkia.