Los dos máximos representantes a nivel nacional de la Confederación Española de Policía (CEP) se han trasladado a Melilla para reunirse con diversas autoridades, entre ellas el presidente y el delegado del Gobierno en la ciudad autónoma, con el objetivo de hacerles llegar el sentir del colectivo policial ante el repunte experimentado en los últimos meses en el número de provocaciones y agresiones que se han registrado en los pasos fronterizos con Marruecos. En este sentido, la Ciudad Autónoma confirmó ayer que la reunión entre el presidente Juan José Imbroda y el secretario general de la CEP, Ignacio López García de la Torre, tendrá lugar en el Palacio de la Asamblea a las 12.15 horas.

La Jefatura Superior de Policía de Melilla denunció que su trabajo en la frontera «se ha convertido en una tarea de alto riesgo, especialmente por los ataques que, de forma periódica, se producen desde la parte marroquí de la frontera y, más preocupante aún, desde el espacio comprendido entre ambos países y que se considera una «zona neutra», aprovechada por exaltados perfectamente adoctrinados y tutelados para lanzar todo tipo de objetos contundentes a policías españoles».

CEP aseguró también que en uno de los ataques sufridos este año por los policías destinados en un paso fronterizo de Melilla ya se registraron más heridos que en todo un semestre de cualquiera de los tres años anteriores, desbordando así la estadística de siniestralidad de la Jefatura Superior de Policía.

Contra ello piden una doble respuesta policial y judicial, con el refuerzo de los efectivos destinados en aquella plantilla y una eficaz labor de los jueces, como medidas a corto plazo para la gestión del problema.