La familia Vidrascu pide una segunda autopsia del menor de Vicálvaro
La Razón, , 24-11-2012Insiste en que la causa de la muerte de Gabriel no fue un corte de digestión y que el primer informe forense está plagado de errores
MADRID – Casi cincuenta días después de que se confirmara la muerte de Gabriel Vidrascu, el niño rumano desaparecido en Vicálvaro, sus padres recibieron ayer el informe de la autopsia. Conclusiones que los Vidrascu esperaban con ansia para poder conocer lo que realmente sucedió con el pequeño y también para poder enterrarlo en su país natal.
Sin embargo, el resultado del citado informe sólo ha servido para multiplicar la indignación de la familia. Desde su entorno califican el escrito de la autopsia como «chapuza». De hecho, y aunque en un momento del escrito se hace referencia de forma genérica a una posible violencia en la muerte de Gabriel, en las conclusiones se achaca su fallecimiento a una parada cardiorespiratoria, tal y como se subrayaba en el informe preliminar. Aunque en el documento recibido por la familia todavía faltan los resultados de dos pruebas forenses, el informe también recoge como desencandenante del fatal final de su vida un corte de digestión. Un extremo que la familia ve improbable, ya que Gabriel comió poco después de la una de la tarde y salió de su casa para jugar con sus amigos pasadas las cuatro de la tarde.
El informe de la autopsia incluye otros errores de bulto. El primero de ellos hace referencia a la edad de Gabriel: asegura que el niño fallecido tenía 15 años, cuando en realidad tenía 12. A este detalle se une el hecho de que el documento asegure que Gabriel llevaba, en el momento en el que fue hallado su cadáver, 14 días sin vida. Sin embargo, su desaparición en el Parque de la Vicalvarada tuvo lugar el lunes 24 de septiembre, y el hallazgo de su cuerpo se produjo el 4 de octubre. Dos fechas separadas por apenas 10 días, cuatro menos de los recogidos en el informe.
Estos errores han llevado a la familia y a su abogado a solicitar una segunda autopsia que arroje más luz sobre un caso que parece todavía lejos de su resolución total. Si el juez da luz verde a esta segunda autopsia, el encargado de realizarla sería el doctor Luis Frontela –médico forense considerado una eminencia en este ámbito y responsable de autopsias como las de Mari Luz Cortés o las niñas de Alcasser–.
El objetivo de esta segunda autopsia es dar respuesta a sombras de este primer informe –corte de digestión, parada cardiorespiratoria– y, además, aclarar otras cuestiones. Y es que la investigación tampoco ha podido aclarar hasta el momento por qué los zapatos que llevaba Gabriel cuando desapareció fueron encontrados en una zona muy alejada al punto de la laguna en el que fue hallado el cadáver. Por otra parte, la camiseta del niño nunca se llegó a encontrar. Pese a las conclusiones de este documento y de la «muerte natural» que recogía el informe preliminar, la familia insiste en que lo sucedido con el pequeño no responde a un accidente. Entre otras cosas porque, como defiende su entorno, el niño nunca acudía a jugar con sus amigos al descampado cercano a la laguna. Sólo esa segunda autopsia, según sus padres, podrá despejar todas estas incógnitas.
Sin dinero para la repatriación del cadáver a Rumanía
Mientras se aclaran las causas que rodean la trágica muerte de Gabriel, Vicálvaro continúa volcándose con la recaudación de dinero para ayudar a la familia con la repatriación del cuerpo del niño a Rumanía para que pueda ser enterrado en su país. Una gestión cuyo coste final se sitúa en torno a los 7.000 euros. Por ello, los vecinos han repartido huchas solidarias por el barrio y el colegio La Presentación ha puesto en marcha varias iniciativas con este fin. También hay abierta una cuenta bancaria: 0049 – 3154 – 41 – 2814030977.
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