En sólo 48 horas la Policía ha resuelto un secuestro que, por chapucero, no dejaba de ser peligroso para el rehén. De hecho, no sería raro que la víctima hubiera muerto de frío si no la llegan a liberar los GEO el pasado sábado. Además, los tres secuestradores han sido detenidos.

La historia pudo empezar en realidad hace más de un año. En la comisaría de Getafe, en agosto de 2011, Hemayet Khan, un ciudadano de Bangladesh, denunció que unos tipos trataban de extorsionarle para que les pagara una supuesta deuda de 4.000 euros. No sabía sus nombres, pero sí les conocía por sus apodos.

Pasó un año, sin que este caso por amenazas avanzara ni retrocediera.

Hasta el pasado jueves, cuando reclamaron a Hemayet la deuda que tenía. Primero, según comentó a este periódico el presidente de la Comunidad de Ciudadanos de Bangladesh en España, le engañaron prometiéndole que conseguiría un préstamo de un banco: «Convencieron a Hemayet para que bajara de casa con su libreta de ahorros y su tarjeta de residencia. Dos horas después fueron a buscarle unos hombres con cuchillos, le ataron y se lo llevaron amordazado a la casa de la sierra».

El hermano de Hemayet, Polay Khan, fue a la comisaría de Arganzuela a poner una denuncia, ya el día de la Almudena, acompañado del presidente de la asociación de bangladesíes. Allí relató que había recibido una llamada de un hombre que parecía paquistaní, que le dijo que llamara a dos teléfonos para concertar el pago de una deuda de 4.000 euros a cambio de la liberación de Hemayet.

El grupo de Secuestros y Extorsiones de la Brigada Provincial de Policía Judicial y su homólogo de la Comisaría General de PJ se pusieron manos a la obra y pinchó esos teléfonos con autorización judicial del titular del Juzgado de Instrucción número 50. Pronto averiguaron que la víctima podía estar en una casa de Lozoyuela, en la sierra de Madrid, y que los secuestradores se dirigían allí.

Varios agentes investigaron los alrededores de la casa y llegaron a la conclusión de que Hemayet podría estar allí.

Al día siguiente, el sábado, pidieron autorización al juez de guardia, el del Juzgado de Instrucción número 6 de Madrid, para la entrada y registro de la casa, pero éste se la denegó. El argumento, según fuentes del caso, es que no era su jurisdicción, así que los investigadores se dirigieron al Juzgado número 1 de Torrelaguna. Éste sí autorizó la entrada, y poco después los GEO asaltaban la casa. Detuvieron allí a Shahid Akbar, nacido en 1978; a Ahmed Riaz, de 1970; y a Fernando Gil, de 1949. Los dos primeros son paquistaníes y el tercero español, y todos viven en Getafe.

Los primeros son los autores del secuestro, mientras que el tercero es el dueño de la finca, considerado su cómplice. Hemayet Khan estaba en calzoncillos, atado de pies y manos a una cama dentro de un chamizo de la finca, situada en la parcela 124 del paraje de Las Vegas, en Lozoyuela. El hombre estaba muy asustado y muerto de frío, y sólo le habían dado un vaso de agua y un mendrugo de pan para alimentarle.

La hermana del dueño de la finca donde estuvo secuestrado el hombre aseguró que su familiar era inocente. «A mi hermano le han engañado», contó. «Él me dijo que el viernes acudió aquí porque había quedado con el ex marido de una sobrina nuestra y que quedó en volver el domingo. Cuando regresó se encontró a la Policía y lo detuvieron», relató ayer la mujer. «Toda la culpa de lo que ha ocurrido la tiene el ex marido de mi sobrina. Mi hermano no sabía nada y sólo le dijeron que habían quedado con otras personas para un asunto», agregó.