ras cerca de un año de investigación, los Mossos d’Esquadra efectuaron ayer una redada para detener a los miembros de una organización dedicada a traficar con inmigrantes, especialmente paquistanís, a los que cobraba grandes cantidades de dinero por llevarlos desde Pakistán hasta España y, desde aquí, trasladar a algunos de ellos a otros países de la UE, sobre todo Gran Bretaña, según informaron a este diario fuentes cercanas al caso.

Los policías autonómicos llevaron a cabo al menos nueve registros domiciliarios en Barcelona y L’Hospitalet y detuvieron a unas 12 personas. El epicentro de la operación fue el barrio del Raval, donde los agentes entraron en varias viviviendas de las calles de Robadors y de la Aurora, así como en al menos un supermercado. Uno de esos domicilios funcionaba como piso patera, donde uno de los paquistanís detenidos cobraba a una decena de compatriotas que vivían allí en condiciones infrahumanas.

Las pesquisas están siendo coordinadas por el juzgado de instrucción número 29 de Barcelona, que mantiene el secreto de sumario sobre el caso. Los Mossos, por su parte, no han informado del número de detenidos y de registros llevados a cabo. En las entradas en los domicilios, se utilizaron perros adiestrados para buscar droga escondida.