Sanidade insiste en que atenderá a los inmigrantes irregulares
El Sergas no envió ninguna directriz sobre cómo actuar con este colectivo
La Voz de Galicia, , 30-08-2012El Real Decreto 16/2012, en su artículo 1, establece que los extranjeros no registrados ni autorizados como residentes en España recibirán asistencia en las modalidades de urgencia, asistencia al embarazo y parto, y si tienen menos de dieciocho años en las mismas condiciones que los españoles. Esto quiere decir que los simpapeles no tendrán derecho a tarjeta sanitaria ni a recetas financiadas por el Sistema Nacional de Salud.
La medida entra en vigor el 1 de septiembre, es decir, en dos días, y de momento la Consellería de Sanidade aún no ha comunicado a su personal cómo actuar en estos casos. Aseguran que se está trabajando en ello y desde el Sergas insisten en que «no se le ha dicho al médico en ningún caso que deje de atender a nadie». En la misma línea se manifestó la ministra de Sanidad, Ana Mato, quien ayer se reunió con los consejeros de varias comunidades autónomas para hablar de la reforma sanitaria y repitió que «nadie va a quedar desatendido». Eso sí, los que carezcan de tarjeta sanitaria deberán abonar esa asistencia.
El cómo se va a tramitar ese cobro es lo que deben plasmar ahora las comunidades autónomas, teniendo en cuenta además que muchos de estos simpapeles no solo no tienen recursos sino que proceden de países a los que difícilmente se les podrá facturar esa asistencia. Tanto la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, como la ministra Ana Mato barajan opciones como los programas de salud para prevenir y controlar enfermedades transmisibles en estos colectivos.
Los crónicos tendrán atención
Mato indicó además que los enfermos crónicos tendrán un seguimiento aunque no tengan tarjeta ni residencia legal.
En Galicia, los médicos no han recibido ninguna comunicación de la Xunta sobre qué hacer cuando se presenta un inmigrante simpapeles. Pero lo que tienen claro es que deben atenderlos, «porque no podemos denegar la asistencia», explica Alberto Freire, médico de familia. De hecho, los facultativos ya reciben en sus consultas a personas que no tienen tarjeta sanitaria, «y las atiendes, porque no sabes si es una urgencia o no, hasta que las has atendido». En estos casos lo que no puede hacer el médico es prescribir recetas del SNS y además es necesario abrir una historia clínica nueva. «Si después se les factura la consulta añade Freire, es algo que tendrá que hacer el Sergas. Yo solo constato que le he atendido», explica.
A dos días de que entre en vigor, las comunidades, entre ellas la gallega, deben aún desarrollar y dar a conocer los procedimientos para atender a estos colectivos y que abonen la asistencia si tienen recursos.
(Puede haber caducado)