La Guardia Civil ha localizado por primera vez dos intentos de entrada de inmigrantes escondidos en dobles fondos de vehículos en la frontera de Melilla, actuaciones que tuvieron lugar con sólo dos horas de diferencia y que fueron posibles gracias a un aparato detector de latidos del corazón. Sólo ha sido posible detener a uno de los conductores del vehículo, ya que el otro, al verse sorprendido, emprendió la huida hacia Marruecos y consiguió su objetivo, aunque está «plenamente identificado».

Las dos intervenciones tuvieron lugar el pasado martes por la tarde, la primera de ellas a las 15.00 horas, cuando los guardias civiles de servicio inspeccionaron un turismo marroquí ocupado por su conductor . Los agentes reconocieron el vehículo utilizando los sensores detectores de latidos de corazón, que dieron resultado positivo, lo que originó una exhaustiva inspección, por la que encontraron un doble fondo que ocupaba el lugar del depósito de combustible que había sido retirado. Se localizó a un joven de 25 años que dijo proceder de las Islas Comoras.

Esa misma tarde y por el mismo procedimiento, la Guardia Civil detectó la presencia de otro inmigrante en un turismo con placas marroquíes. El conductor, que aparentaba calma, al verse sorprendido emprendió una «veloz huida» y logró introducirse en Marruecos, «por lo que la persecución realizada resultó infructuosa». El inmigrante es un varón de 23 años natural de Mali.