La plataforma Yo sí atiendo presentó este viernes en el Gobierno de Canarias un total de 203 declaraciones individuales de objeción de conciencia, firmadas por profesionales del SCS en contra de la ley que deja sin cobertura sanitaria a una proporción importante de la población inmigrante.

Estos documentos fueron entregados y verificados uno por uno en la sede del Ejecutivo en la isla de Gran Canaria y en los mismos, los profesionales manifiestan «su intención de continuar atendiendo tanto a la población inmigrante como a cualquier otro sector de la ciudadanía que pudiera llegar a verse alguna vez excluido del sistema sanitario, ya que no hacerlo iría en contra del derecho universal a la salud y va en contra de varios puntos de sus respectivos códigos deontológicos», relata Ricardo Redondas, de Yo sí atiendo.

Esta plataforma aborda esta cuestión desde el firme convencimiento de que «no vamos a abandonar a ninguno de nuestros pacientes. El inmigrante no es un turista sanitario, es un  ciudadano que convive con nosotros y que además es un contribuyente indirecto de los presupuestos sanitarios», comenta Redondas. «Los estudios muestran que la población inmigrante hace un menor uso de los recursos sanitarios que la población autóctona. Su exclusión del sistema sanitario empeorará su estado de salud y retrasará acciones preventivas adecuadas», dice.