Bascuñana (centro), junto a los comisarios Alcaraz (izq.) y Vidal (drcha.), ayer, en el CIE . :: EFE

La Policía Nacional ha divulgado a nivel nacional las identidades de los diez inmigrantes que permanecen fugados desde el pasado sábado, cuando huyeron del Centro de Internamiento de Emigrantes (CIE) de Sangonera la Verde. Con este envío de datos al resto de comisarías españolas se pretende facilitar su detención, «donde se les pueda localizar», y ponerlos a disposición judicial, como ya ha ocurrido con los otros quince que fueron arrestados pocos minutos después de su fuga.

Así lo explicó ayer el jefe superior de Policía en funciones, Pedro Vidal Espinosa, quien realizó una visita, junto al delegado del Gobierno, Joaquín Bascuñana, a las instalaciones del CIE.

Bascuñana confirmó que la Policía Nacional está llevando a cabo todas las pesquisas posibles para localizar a los diez fugados, y lanzó un mensaje de tranquilidad a la población, porque «no son delincuentes peligrosos ni han cometido ningún delito en España. Únicamente se trata de personas que llegaron en patera y están indocumentados».

El delegado confirmó que los incidentes se produjeron el sábado a las 19.40 horas, , antes del partido de fútbol que enfrentó a España y Francia en la Eurocopa, cuando la Policía abrió el recinto en el que estaban los hombres alojados para que pudieran salir a los servicios.

Normalmente, explicó, los internos salen en grupos de cinco personas como máximo, pero en esta ocasión, cuando el agente abrió la puerta del pabellón, los inmigrantes evitaron que la cerrara y comenzaron a empujarle, mientras otro interno entretenía a un segundo policía.

De esta forma se acumuló un número importante de internos en la puerta y evitaron su cierre, arremetiendo contra los agentes con mangueras y extintores. Incluso, uno de los implicados intentó abrir el recinto de mujeres para crear más confusión, pero la policía logró evitarlo.

Bascuñana confirmó que, tal y como e ha comprobado por las imágenes de videovigilancia, el ataque y la fuga «estaba totalmente premeditado y preparado». La celeridad con la que se activó el dispositivo policial posterior permitió evitar la propagación del incidente en el CIE, así como la inmediata localización de quince de los fugados.

Los quince detenidos tendrán que comparecer hoy ante el juez, puesto que ahora «sí que han cometido un delito, ya que han arremetido contra la autoridad y han producido daños», por lo que «será el juzgado el que dicte los autos que correspondan».

Cuatro agentes «magullados»

Bascuñana explicó que los cuatro policías agredidos se encuentran «perfectamente» y están «muy bien» en el aspecto psicológico. No obstante, todos están de baja y alguno está recuperándose porque los golpes, tanto en las piernas como en algún dedo, les causaron «magulladuras propias del enfrentamiento».

En concreto, uno de los policías tiene una fractura en un dedo, y otro tiene una pequeña luxación en el hombro, según el comisario.

En este sentido, felicitó al Cuerpo Nacional de Policía porque los agentes «actuaron con total profesionalidad y en ningún momento, aún siendo un motín en toda regla, golpearon a ninguno de los internos». Incluso señaló que esa forma de proceder supuso que los policías «pudieran sufrir algún golpe por parte de los internos».

Los 25 inmigrantes fugados llegaron todos en la misma patera, que desembarcó el 9 de junio en las costas de Almería con 41 personas a bordo», según el delegado, quien confirmó que este motín ha sido el acto más «contundente y definitivo», pero que anteriormente ya habían protagonizado algún acto de semejantes características.

De hecho, recordó que alguno de ellos decía ser menor de edad y que, en el momento en que la Policía tuvo que hacerles la prueba para determinar su edad, provocaron «algún rifirrafe con la Policía», por lo que ya se veía «que no tenían el respeto que debían de tener y solo ansiaban salir de aquí».

Admitió que alguno de los detenidos «tenía alguna magulladura», pero propia del acto de fuga, al saltar o al salir por las redes metálicas.

Ahora hay 107 internos

En estos momentos hay 107 internos en el CIE, que proceden de la mitad sur de España. El de Sangonera es el único centro de acogida y referencia para los inmigrantes detenidos desde Madrid hasta el sur, tras el cierre del centro de Málaga. De tal forma que solo 23 proceden de las comisarías de la Región y, el resto, hasta 84, han llegado de otras regiones; setenta de ellos proceden de Almería.

El centro tiene capacidad para acoger hasta 137 internos, tanto hombres como mujeres o familias enteras, que también tienen sus dependencias habilitadas. En el centro se encuentran «con normalidad y sin ningún tipo de agrupación o masificación» con el objetivo final de ser retornados a su país.

Bascuñana dijo que es necesario hacer una reflexión sobre lo sucedido y dijo que habrá tiempo de estudiar «los motivos y las necesidades que hay, o si hubiera que llevar a cabo alguna otra actuación». De todas formas, manifestó que este tipo de fugas «no es lo normal ni lo ordinario en el CIE , que lleva dos años funcionando y nunca ha habido un episodio de esta magnitud».

El comisario señaló que las medidas de seguridad son las mismas que tienen los centros de Valencia y Barcelona, pero indicó que habrá que «analizar la situación y estudiar medidas como incrementar los policías u otras que eviten en lo posible lo que sucedió el sábado».