Un año después de su toma de posesión como alcalde de Badalona, Xavier García Albiol se reafirma en sus tesis más controvertidas, aquellas que apuestan por poner freno a la inmigración ilegal y dar prioridad, en materia de ayudas sociales, a los vecinos nacidos en esta ciudad.

El dirigente popular, que gobierna la tercera ciudad catalana con más población, pronunció el lunes por la noche la conferencia «Badalona, un presente que construye futuro», en el Teatro Zorrilla. Recién exculpado judicialmente por el reparto de folletos en los que supuestamente ofendía al colectivo rumano afincado en esta ciudad, el edil fue muy aplaudido cuando abordó cuestiones como la inmigración o el incivismo.

García Albiol dijo que en los próximos días presentará un reglamento que permitirá al Ayuntamiento «poner orden dentro del desorden existente y racionalizar la concesión de las ayudas económicas sociales» pues, reiteró, «mi prioridad como alcalde, entre un señor que acaba de llegar y un vecino de Badalona, son los vecinos de Badalona». Asimismo, el alcalde prevé aprobar un decreto «dirigido a los barrios de Sant Roc, Artigues y El Remei, por el cual se obligará a cerrar los bares conflictivos como muy tarde a las 22.30 horas».

En su balance, Albiol aseguró que Badalona tiene actualmente un 77 % más de guardias urbanos en la calle que hace un año y que en los cinco primeros meses de este año se han impuesto 1.119 sanciones por comportamientos incívicos, frente a las 456 sanciones cursadas en todo el 2010 y las 503 del año pasado. García Albiol atribuyó la desestructuración social de algunos barrios a «los problemas de integración y convivencia provocados por un determinado tipo de inmigración instalada entre nosotros».