Después de cuatro años de anuncios y más anuncios el primero lo hizo Alfredo Pérez Rubalcaba en 2008, cuando ocupaba la cartera de Interior, por fin se inauguraron ayer las comisarías conjuntas entre Marruecos y España. Centros de Cooperación Policial con sede en el puerto de Tánger Med el de mayor tráfico en el norte del reino alauí y en Algeciras, para cuya materialización se firmó un acuerdo en 2010.

A partir de ahora, con estas nuevas estructuras, españoles y marroquíes intercambiarán información, de manera más estrecha, en materia de inmigración, terrorismo, tráfico de armas y estupefacientes, vehículos y personas, y toda forma de crimen organizado. «Podremos facilitar rápidamente datos sobre matrículas, por ejemplo, o antecedentes penales para colaborar con nuestros compañeros marroquíes», explicó ayer Luis Mayandía, coordinador adjunto del dispositivo en Tánger Med. Hasta el momento, la colaboración «se producía sólo en algunos delitos puntuales», según fuentes policiales.

El ministro del Interior, Jorge Fernández, constató que el intercambio de información se hará salvaguardando la ley española y que no podrán ejecutarse detenciones porque Marruecos tiene la soberanía. De hecho, los policías españoles se pasean por las instalaciones del puerto inaugurado en 2010 sin armas. Una estampa, sin embargo, imposible hasta ahora. «Es la primera vez que España cuenta con estos centros en países no comunitarios», señaló Fernández. Acompañado por su homólogo marroquí, Mohand Laenser, el titular de Interior español destacó que «se trata de una apuesta de futuro con un Estado con el que cada vez tenemos una cooperación más leal y mayor confianza».

España dispone, desde hace años, de comisarías conjuntas con Francia y Portugal. En ese caso, son centros de cooperación policial y aduanera, explicó Luis Mayandía. La diferencia radica en que con Lisboa y París «podemos llevar a cabo las denominadas persecuciones calientes, o transfronterizas», mientras que con Marruecos, no.

Este proyecto ya materializado lo estrenan tres agentes de la Policía Nacional y otros tantos de la Guardia Civil, con dos coordinadores al frente, desplazados al puerto. La misma estructura de policías y gendarmes marroquíes se ha trasladado a Algeciras. «Todos ellos colaborarán codo con codo 12 horas al día», dijo el ministro del Interior español.

«Con estos centros se quiere hacer algo físico y real, que vea la gente», puntualizó Mayandía, quien añadió que los agentes españoles desarrollarán labores diplomáticas en los consulados de Tánger y Tetuán.

Antes de desplazarse en helicóptero con Laenser a Algeciras para inaugurar allí el otro centro policial, Fernández insistió en que «las relaciones bilaterales con Marruecos son de vecindad, pero también de amistad».

La última vez que se anunció este proyecto fue el pasado 28 de febrero, durante una visita de Fernández al reino alauí. La primera fue en julio de 2008 y lo hizo Rubalcaba junto al entonces titular de Interior marroquí, Chakib Benmoussa. Al poco insistía el entonces secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho. Y en agosto de 2010, Rubalcaba volvía a desempolvarlo con otro ministro del Interior en la cartera marroquí, Taieb Cherkaoui.

Los cuerpos policiales de ambos países colaboran desde enero de 2011 con oficiales de enlace en los aeropuertos de Barajas, en Madrid, y Mohamed V, de Casablanca. Y desde el año 2004, con patrullas conjuntas de la Guardia Civil para frenar la inmigración clandestina.