LEYRE IGLESIAS / Bilbao
Son adolescentes, casi niños, que
coinciden en el instituto o a través de
gustos comunes como la música. La
mayoría procede de familias latinoamericanas,
pero también hay autóctonos
que se enganchan al atractivo
del grupo. Descontentos con la
sociedad y sus reglas, son captados
de forma directa o por las redes sociales
y caen seducidos por el sentimiento
de pertenencia a un grupo
cerrado y controlado por un líder.
«La pandilla les da seguridad y una
apariencia de progreso económico»,
indica el experto Óscar Terminiello,
que los describe como radicales, machistas,
homófobos y racistas.
Sus delitos: desde robos, lesiones
y amenazas hasta narcotráfico y homicidio.
Su excusa: recuperar lo que
España expropió a Latinoamérica.
En Euskadi estos grupos no abundan
como en Madrid y Cataluña
–debido en buenamedida al menor
índice de inmigración y a una mayor
protección social– pero se dejan notar
en las callesmediante grafitis y
códigos que ocultan mensajes a través
de abecedarios como el persa y
una mezcla entre braille y árabe.
Son, a grandes rasgos, tres grandes
parejas de bandas las que se disputan
las calles y se profesan enfrentamiento
eterno. Su estética era antes
reconocible, porque cada una
utilizaba los colores de su bandera
nacional. Hoy la presión policial ha
hecho que su imagen se haya «mimetizado
», explica el profesor de la
Universidad Rey Juan Carlos Rafael
Marcos Aranda, experto en programas
para prevenir la delincuencia
entre jóvenes extranjeros. En Euskadi
se encuentran en un estado «embrionario
» y se relacionan con el tráfico
de drogas y peleas que suelen
tener lugar a la salida de discotecas.
e’LATIN KINGS’ Y ‘ÑETAS’. Las
pandillasmás fuertes ymejor identificadas
por la policía. Proceden de
Ecuador y la República Dominicana
y practican la extorsión con sus
miembrosmás jóvenes, incluso de 9
años, que se ven obligados a pagar a
la organización «unos tres euros a la
semana». En el barrio de Cruces, por
ejemplo, se han encontrado pintadas
con las siglas ADR (amor de rey),
una expresión de los latin kings.
e’DDP’ Y ‘TRINITARIOS’. DominicansDon’t
Play (‘los dominicanos no
juegan’) y los trinitarios surgen en
España al compás de la pareja anterior,
enMadrid, captando a jóvenes
de las otras pandillas. Son «bandas
de aluvión»: latinos pero también españoles
y procedentes del Este, sobre
todo de Rumanía. Según Marcos,
carecen de un contenido doctrinal
tan fuerte como los anteriores y
su delincuencia está vinculada al
consumo de drogas propio. Los DDP
se caracterizan, por ejemplo, por violar
a las mujeres nativas para que
sus descendientes perpetúen la saga.
e’MARA SALVATRUCHA’ Y ‘BARRIO
18’. Procedentes de El Salvador,
son gangs con un nivel de organización
«muy alto» y una fuerte
vinculación con el crimen
organizado, sobre todo tráfico de
drogas y asaltos a viviendas.