Baiona

EL colonialismo francés en Gabón, materializado en el saqueo de los recursos naturales y la conspiración político militar para asegurar un gobierno de Libreville favorable a los intereses de París, ha sido incuestionablemente una de las causas que han producido el lugar que la señora Marie (nombre ficticio) ocupa en el mundo, aunque “esto es irrelevante en el fondo de este asunto”, dice el abogado que representa al prefecto del departamento mientras espera que empiece la audiencia en los juzgados de Baiona. Estaba prevista a las dos pero ya han dado las tres y todavía sigue la espera, porque la abogada de oficio no ha terminado de leer el dossier, que “es muy complicado” según dice.

Sin embargo, Marie lo ha explicado de forma muy sencilla. Una de sus hijas había muerto en Francia dejando dos jóvenes huérfanas a las que no había podido conocer todavía. Unos familiares se ofrecieron a pagar el viaje a París y ella accedió a la invitación. Como el Gobierno francés sospecha sistemáticamente de todos los africanos pobres que piden visados de turista y se ha reducido drásticamente el número de solicitudes acordadas, a Marie le dijeron que quedaba la opción de pedir el visado de Italia, dentro del espacio Schengen, para luego viajar a Francia.

Las personas que le organizaron el viaje le dieron una reserva de hotel en Milán, reserva que ni siquiera tendría que usar porque su avión aterrizaría en París. Fue en el aeropuerto donde la Policía se le echó encima el pasado 4 de enero. Comprobaron que la reserva de hotel no había sido pagada y que por tanto podían considerarla como falsa, así que trataron de embarcarla en el primer avión de vuelta a Gabón. La mantenían retenida en una zona de espera donde había otras 30 o 40 personas a las que tampoco permitían entrar en Francia y allí aprendió que tenía derecho a negarse a embarcar, con lo que quedaría en manos del juez, y tal vez siendo encarcelada, pero podía además pedir asilo para tener papeles provisionales durante la tramitación de la solicitud. “Es lo que hacía todo el mundo y yo también lo hice”, dice.

volver a gabón Se lo ha explicado al juez con toda claridad, “no soy una mujer con grandes estudios”, para hacerle ver que no entiende las sutilezas normativas de este proceso ni la conversación interna del proceso. “Nací en 1954, tuve 17 embarazos, 10 nacimientos y uno murió” le ha dicho a la juez, y solo quiere volver a su país, pero el problema es que el procedimiento de solicitud de asilo no se interrumpe por la renuncia unilateral del solicitante de asilo, si no es por decisión del país responsable de la demanda de asilo, a la ocurrencia Italia, porque la autoridad competente para tratar el expediente de asilo debe ser la misma que concedió el visado. Detenida por segunda vez el 20 de abril, cuando se dirigía a Lourdes para rezar, el prefecto del departamento de los Pirineos Atlánticos se ha puesto en comunicación con Italia, “que ya la buscaba”, según el abogado del prefecto, aunque tal vez sólo requería su presencia, y han decidido que sin escuchar lo que ella tenga que decir, ni pensar en cómo podrían ayudarle a volver sana y salva con su familia, sea conducida a Milán el próximo 2 de mayo, para dar continuidad al expediente de solicitud de asilo.

lágrimas A las cinco de la tarde, la juez de Baiona ha decidido que no hay lugar para la prolongación del arresto pero “a la modalidad clásica”, esto es, dejando al fiscal la posibilidad de recurrir la sentencia dejando en suspenso la decisión de la juez, tal y como ha ocurrido. Y ahora el proceso está en manos del tribunal de apelación de Pau y de otro abogado de oficio del colegio de esa ciudad. A Marie le han salido las lágrimas cuando la abogada le ha traducido la sentencia y se ha despedido de ella para que sea nuevamente conducida por la policía al centro de retención de Hendaia en el que permanece.

Marie fue arrestada el pasado 20 de abril cuando se dirigía a Lourdes a rezar por las personas que quiere. Iba con una pequeña bolsa de viaje y desde entonces no ha tenido comunicación con ningún familiar. Las sutilezas legales y los distintos procesos que ha padecido en los últimos cuatro meses hicieron que dilapidara sus recursos pecuniarios y ese fue el motivo principal por el que había retrasado su viaje de vuelta a Gabón.