La ministra de Sanidad, Ana Mato, ha asegurado este martes que España, con la reforma sanitaria aprobada el viernes, se equipara a la Unión Europea en derechos sanitarios para los extranjeros, que recibirán la atención sanitaria básica.

Mato se ha expresado en estos términos en los pasillos del Senado, donde ha defendido una de las medidas anunciadas el pasado viernes tras el Consejo de Ministros, que restringe el acceso de los inmigrantes a los servicios sanitarios.

La ministra ha especificado que los inmigrantes “simplemente se quedan sin tarjeta sanitaria” pero no sin asistencia básica, “como en el resto de los países de la UE”, ya que el uso de la tarjeta sanitaria “corresponde a los españoles”.

Según ha explicado, este acuerdo es “de obligado cumplimiento” para equiparar las políticas del Estado a la normativa europea, que contempla que los ciudadanos extranjeros tengan derecho a “una atención sanitaria básica en urgencias”.

Ha destacado que con esta modificación del acceso a los servicios sanitarios “se pone coto a los abusos” y al “turismo sanitario” que, según la ministra, ha sido denunciado por el Tribunal de Cuentas y cifrado en mil millones de euros de gasto en el sistema sanitario por parte de personas “que no tienen derecho a ella”.