Donostia. La consejera vasca de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, rechazó ayer la medida anunciada el viernes por el Gobierno central de “restringir el acceso normalizado” a la Sanidad a inmigrantes por ser “dura y equivocada”.

A partir de ahora, el empadronamiento no será suficiente para acceder al sistema sanitario. La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, adelantó que el Ejecutivo modificará la Ley de Extranjería, de modo que a los inmigrantes, a la hora de empadronarse, se les exigirán una serie de requisitos añadidos para acceder a los servicios sanitarios.

De este modo el Gobierno central se ha propuesto combatir el llamado “turismo sanitario”, por el cual familiares de residentes extranjeros legales venían recibiendo atención.

En un comunicado, Zabaleta solicitó ayer que la legislación de extranjería “se modifique para permitir que las personas inmigrantes al empadronarse puedan tener un permiso provisional revisable para poder trabajar”. En este sentido, manifestó que “si las personas extranjeras pueden trabajar, no dependerán de las prestaciones sociales” ni serán objeto de la economía sumergida. “El camino correcto es luchar contra las mafias y contra la economía sumergida, a través de la transparencia y de la legalidad”, zanjó.