48 inmigrantes rescatados de una barcaza al sur de las costas de la isla italiana de Lampedusa avisaron de la muerte de otros diez indocumentados que viajaban en la misma embarcación, informaron hoy los medios de comunicación italianos.

Según su testimonio, los diez inmigrantes fallecidos, seis de origen somalí y cuatro eritreos, perdieron la vida durante la travesía en aguas del Mediterráneo.

La embarcación en la que viajaban, que había salido de Libia, fue rescatada ayer por las autoridades italianas a unas sesenta millas al sur de la pequeña isla de Lampedusa tras una petición de socorro emitida a través de un teléfono por satélite.

En el momento del rescate, la barcaza estaba a la deriva y en condiciones precarias, por lo que corría el riesgo de hundirse.

Las autoridades italianas no han podido verificar hasta el momento la veracidad de los hechos, aunque miembros de organizaciones humanitarias que recogieron los testimonios de los supervivientes los han considerado creíbles, según los medios.

La pequeña isla de Lampedusa, situada en el mar Mediterráneo, está considerada por muchos como la puerta de entrada a Europa por su proximidad con las costas africanas.

Con la llegada del buen tiempo se incrementa el número de personas que intentan la travesía desde las costas de África.

En 2011, tras el estallido de las revueltas populares en el norte de África en países como Túnez y Libia, la isla recibió una oleada de inmigrantes que intentaban alcanzar las costas europeas y que pusieron a la isla en una situación de emergencia.

Según los datos ofrecidos por el Ministerio italiano del Interior, entre el 1 de enero y el 31 de julio de 2011 llegaron a las costas italianas 48.036 inmigrantes, en su mayor parte de origen libio y tunecino.

La ministra del Interior, Anna Maria Cancellieri, señaló en los últimos días que desde comienzos de 2012 han alcanzado las costas italianas cerca de 1.407 inmigrantes, frente a los 20.000 que llegaron en el mismo período del año anterior.