Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal integrada por ciudadanos de origen español y brasileño, asentada en Valencia, dedicada principalmente a la trata de seres humanos para su explotación sexual y favorecimiento de la inmigración.

Las investigaciones se iniciaron a mediados de diciembre cuando la policía tuvo conocimiento de la existencia de una organización que se dedicaría a la explotación sexual de mujeres de origen brasileño.

Los agentes averiguaron que la organización tenía personas en Brasil encargadas de localizar a posibles víctimas, así como de acompañarlas hasta que subían al avión, con destino España, para tenerlas controladas y que no pudiesen huir, ya que habían invertido una cantidad de dinero en el viaje, así como explicarles posibles incidencias en controles policiales.

La organización estaba compuesta por cuatro personas: una de las mujeres era la dueña de la casa de citas y la otra, la encargada del establecimiento, uno de los hombres el encargado de recoger el dinero recaudado en la casa y el otro se encargaba de llevar algún tipo de sustancia cuando le fuera solicitado.