San Sebastián
La violencia contra la mujer se cobró
ayer su primera víctima mortal
en lo que va de año en Euskadi y la
novena en el conjunto de España.
Un joven de 26 años fue detenido
por la Ertzaintza el domingo por la
noche acusado de acuchillar a su
pareja, en la localidad guipuzcoana
de Tolosa.
El arrestado se confesó autor de
la muerte de su novia, Ángeles,
una mujer cubana de 39 años que
no había presentado previamente
ninguna denuncia por malos tratos.
Se trata de un vecino de Tolosa
que cuenta con otras siete detenciones
anteriores –por robo, tráfico
de drogas, amenazas y una
imputación por delito de violencia
de género en 2009–, por algunas
de las cuales pasó cuatro años en
prisión, según la Ertzaintza.
El detenido fue trasladado a una
clínica del municipio ya que presentaba
varios cortes que al parecer
se había hecho él mismo en el
antebrazo. Después pasó a Psiquiatría
y luego a comisaría.
El hallazgo del cadáver tuvo lugar
sobre las 20.00 horas de ayer,
cuando el ex marido de la víctima
avisó a la Ertzaintza porque la mujer
no le abría la puerta de su piso,
ubicado en el número 25 de la calle
Uzturre, en el barrio de Larramendi
de Tolosa. Una vez dentro
del domicilio, los agentes encontraron
en una de las habitaciones el
cuerpo de la mujer, que presentaba
un corte en el cuello, y localizaron
varios cuchillos, uno de los cuales
podría ser el que utilizó el agresor.
Tres horas después del hallar el
cadáver se presentó en la vivienda
el actual compañero sentimental
de la víctima, que fue detenido como
presunto autor material del crimen
y que posteriormente admitió
haber cometido, informa Efe.
El joven convivía con la víctima en
este domicilio, según indicaron los
vecinos. Uno de ellos lo definió como
un «sinvergüenza» que «estaba
más veces dentro que fuera [de la
cárcel]», ya que «andaba trapicheando
con todo lo que pillaba».
Cuando fue detenido, el joven presentaba
cortes en el antebrazo infligidos
por él mismo, según indicó el
Departamento de Interior, que precisó
que, por este motivo, fue trasladado
a una clínica de Tolosa.
El arrestado fue derivado
de esta clínica a la
unidad de Psiquiatría
del Hospital Donostia,
donde fue reconocido.
El edificio en el que
vivía la víctima, habitado
desde hace apenas
cuatromeses, es un inmueble
nuevo de siete
alturas perteneciente a
la promoción Voith-Gorostidi,
que incluye pisos
libres, tasados y de
protección oficial. En él
viven muchos vecinos
inmigrantes, además de
oriundos de Tolosa que
fueron realojados de las
casas que ocupaban los
terrenos sobre los que
se construyeron los actuales
edificios.
Instituciones, partidos políticos y
asociaciones condenaron ayer el
asesinato de Ángeles y coincidieron
en que la lucha contra la violencia
machista requiere de la implicación
de todos, también de la sociedad. En
las calles de Tolosa, unas 200 personas
expresaron su rechazo a los hechos.
A la concentración asistieron
el subdelegado del Gobierno en Gipuzkoa,
José Luis Herrador Gutiérrez;
la directora de Atención a las
Víctimas de la Violencia de Género,
Mariola Serrano; así como el diputado
general, Martin Garitano, y la
presidenta del Parlamento foral,
Lohitzune Txarola.
Horas antes, el alcalde del municipio,
Ibai Iriarte, de Bildu, manifestó
su impotencia ante el asesinato
y añadió: «Como sociedad
estamos haciendo algo mal, porque
no hay más que ver la cantidad
de mujeres asesinadas, un día
sí y casi otro también, que tenemos
encima de la mesa».