Arnal publica su libro 'Nicolás', que invita a mirar el mundo con otros ojos

El Correo, A. LASUEN, 25-03-2012

El escritor ermuarra Txabi Arnal ha publicado su nuevo libro, titulado ‘Nicolás’. La historia que encierra este cuento, escrito por Arnal e ilustrado por Patxi Gallego, «invita a mirar el mundo con los ojos bien abiertos» según explican desde el grupo editorial edebé.

Cuenta la historia de Nicolás, que procede de Sudán, llegó hace unos meses y, aunque es un chico alto, atlético y negro como el ébano, no es un campeón de natación, pero sí un héroe, un verdadero superhéroe.

En esta obra de 32 páginas (7,70 euros), que se puede leer tanto en castellano como en euskera, se muestra de un modo sencillo la crudeza de la vida de algunas personas que se ven obligadas a emigrar de sus países.

Arnal está convencido de que ‘Nicolás’ «es un libro que pesa, a pesar de su aparente simplicidad. Quiero decir que los hechos narrados son tan crudos como duros y reales, pero no por ello deben ser escondidos a los ojos de las niñas y los niños. Todo lo contrario". El escritor entiende que " los niños deben saber que hay realidades y vidas muy difíciles, como la de Nicolás».

El autor de la obra cree que «por encima de todo transmite un final esperanzador a través de la amistad que el niño narrador de la historia muestra a Nicolás». Las ilustraciones son de Patxi Gallego. «Divertidas, sugerentes, desmitificadoras y expresivas», explica Arnal.

Si bien su anterior obra ‘Caja de Cartón’ también se basaba en una historia que tenía que ver con la inmigración y la pobreza, para Txabi esta similitud no se ha producido conscientemente. «No pienso que Nicolás sea una secuela de ‘Caja de Cartón’. Quizás nacieron cercanos en el tiempo y quizás, entonces, por alguna razón que ahora no recuerdo, me sintiese especialmente sensible hacia el tema del racismo, la pobreza y la emigración. Tal vez. De cualquier manera, cuando me siento a escribir no trato ningún tema de manera preconcebida».

Buenas historias

Todos los años que lleva escribiendo y analizando, por su trabajo de profesor, la literatura infantil le permiten hacer referencia a este mundo con conocimiento de causa. Insiste en que «me importa poco sobre qué se escribe en el mundo de la literatura infantil. No me importa el tema si la historia es buena. Y pienso que eso es lo que debe primar. El resto es anecdótico». Claro que defiende que «si la historia es buena, está bien escrita, y además aporta algo a la mejora de este maltrecho mundo, mucho mejor. Aunque aportar una buena historia ya es mucho aportar. Estoy convencido de que si el arte es bueno siempre contribuirá a que seamos mejores personas».

Su forma de escribir, sin un tema preconcebido le permite cierta libertad y por ello entiende que «la literatura no debiera estar a las órdenes de nadie, tampoco de la escuela. Ya sé que muchos niños y niñas leen porque se lo mandan en las escuelas, y que muchas editoriales sobreviven gracias a esos libros que mandan leer y comprar. Pero la literatura, y sobre todo la infantil, debiera tener personalidad propia, y cumplir, ante todo, con el principal objetivo de todo arte: procurar placer».

Aún así es consciente de que ‘Nicolás’ será utilizado en muchas ocasiones con fines didácticos, y que su valor literario quedará relegado a un plano inferior.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)