sociedad
La zozobra de Brahim
los vecinos afectados por el incendio de azkoitia se enfrentan ahora a una situación delicada tras perder sus viviendas
Diario de noticias de Gipuzkoa, , 13-02-2012PASEANTES y curiosos seguían alzando ayer la vista a los inmuebles afectados por el grave incendio registrado 24 horas antes en Azkoitia. Allí, en la calle Mayor, comentaban impresionados el estado ruinoso en el que ha quedado el portal número 14, con su fachada amarilla en pie, así como el tejado calcinado del número 10. En uno de esos círculos, acompañado de algunos compatriotas, se encontraba el azkoitiarra de origen marroquí Brahim Nejme, una de las personas afectadas por el siniestro.
“Estoy muy preocupado”, expresó a este periódico, todavía con gesto de zozobra, pero con el consuelo de que nadie había resultado herido, al fin y al cabo. La madrugada del sábado, él y los suyos su mujer y sus cuatro hijos, uno de ellos de apenas 40 días de vida tuvieron que marcharse de casa con lo puesto. Un disgusto difícil de quitar de encima y que padecieron una decena de familias azkoitiarras, un total de 26 vecinos de dos bloques que se quedaron sin techo como consecuencia del fuego.
A Brahim, de 41 años y natural de Oujda (Marruecos), le inquieta ahora el futuro de su familia, ya que se ha quedado sin la vivienda que había adquirido hace seis años. “Ayer (el sábado) por la tarde pude entrar a por unas cosas. Todo está mojado, lleno de escombros. Pude rescatar un poco de ropa y algunos pápeles, pero el edificio está muy dañado”, relató. Y es que vivía en el quinto y último piso del portal número 10, bajo el tejado que resultó quemado por el incendio originado en el número contiguo. “Las paredes y las vigas están rajadas y hay agua por todas partes. Antes ya estaba en malas condiciones y ahora tendrán que tirarlo”, detalló, a la espera de saber hasta qué punto “el seguro cubrirá” los daños.
Las familias afectadas han sido realojadas por el Ayuntamiento de Azkoitia en el hotel Larramendi de forma provisional, aunque seis personas han preferido pernoctar con sus familiares. El alcalde azkoitiarra, Pello Bastarrika, informó el sábado de que todos los casos se analizarán “uno a uno”, para decidir cómo dar salida a las necesidades existentes a través de los recursos municipales. No en vano, muchos perdieron todas sus pertenencias en el incendio.
Esa es la delicada tesitura a la que se enfrenta la familia de Brahim, que, además, se encuentra en paro desde noviembre. En los once años que lleva viviendo en Azkoitia antes estuvo cinco años en Cartagena (Murcia), ha trabajado en diferentes fundiciones, pero ahora no tiene trabajo. “Mañana (por hoy) volveremos a reunirnos con el alcalde. Por el momento nos están ayudando mucho. En el hotel también nos están dando de comer”, agradece.
Hija de 40 días
“No tenemos ropa para ella”
Preguntado por sus dos hijas pequeñas, este azkoitiarra de barba bien arreglada explica que no tiene ropa para la recién nacida. “Todo está mojado y nos quedamos sin nada para ella”, explica. La medianoche del viernes al sábado Brahim y los suyos estaban durmiendo cuando les sobresaltaron las sirenas. Había un incendio en el bloque de al lado. “Vi que solo era humo”, se dio cuenta, así que decidieron volver a la cama. “Pero a la una menos cuarto entraba mucho humo y tuvimos que traer a mis hijos a nuestra habitación. Porque, además, mi hija de tres años tiene asma”, completó.
Pero las llamas amenazaban con prender el inmueble de al lado y les desalojaron. La familia de Brahim decidió pasar la noche en casa de los abuelos, que también viven en Azkoitia. Por la mañana, cuando volvió a la calle Mayor hacia las 7.00 horas, se encontró con que el incendio se había agravado. “Nunca me había pasado nada parecido, pero lo importante es que estamos todos bien”, resumió resignado.
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