Paterna acogió ayer el primer Encuentro de mujeres africanas y del mundo en España. Este acto tuvo como objetivo defender los derechos de este colectivo, que, según el director general de Ciudadanía e Integración, José María Felip, es «el más explotado de todos». Cerca de 72.000 mujeres saharianas o subsaharianas residen en la Comunitat. «Muchas ya son valencianas, hablan español y han tenido hijos aquí». Una de las impulsoras de este encuentro ha sido Aissatou Ndiaye, una senegalesa de 46 años, madre de cinco hijos (la pequeña nació en Valencia), que ayuda, pese a sus carencias económicas, a las mujeres sin trabajo. «Queremos trabajar, aprender e integrarnos. Que España conozca nuestra cultura y nosotros, la suya», resume Ndiaye.