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Brasil “está trabajando” para evitar que sus emigrantes en la Guayana Francesa se involucren en búsqueda ilegal de oro y se conviertan en una amenaza, dijo el viernes el canciller Antonio Patriota, tras el reclamo francés de mayor cooperación en ese frente.

“El Gobierno brasileño quiere asumir plenamente su responsabilidad ante este fenómeno, para que nuestras poblaciones contribuyan, dentro de la legalidad, al desarrollo económico social de los países vecinos y no representen una amenaza”, señaló el ministro.

Patriota dio una conferencia de prensa con su par de Surinam, Winston Lackin, de visita oficial en Brasil. Más temprano, el principal dirigente de la Guayana Francesa, Rodolphe Alexandre, criticó la falta de acción de Brasil ante “la inmigración clandestina” de buscadores de oro en su territorio.

“Da la impresión de que hubiera una orquestación política, una red casi mafiosa que facilita la venida de estos (inmigrantes) clandestinos usados como esclavos”, lamentó. Así, exigió una mayor cooperación a Brasil y Surinam contra la búsqueda ilegal de oro.