El fiscal insiste en que se juzgue al funcionario del Registro acusado de pedir favores sexuales

La Verdad, EFE, 04-11-2011

La representante del Ministerio Fiscal pidió ayer la confirmación del auto de procesamiento dictado contra Francisco S., vecino de Las Torres de Cotillas y encargado de la tramitación de expedientes de nacionalidad en las oficinas del Registro Civil de la capital, al que varias mujeres inmigrantes denunciaron por haberles exigido favores sexuales a cambio de agilizar sus expedientes de nacionalidad.

La fiscal explicó ayer durante la vista del recurso presentado por la defensa de Francisco que los hechos protagonizados por éste «son vergonzosos e incalificables» y añadió que los mismos están acreditados, tanto por las manifestaciones de las denunciantes, como por las grabaciones realizadas en el Registro Civil. En su opinión, el procesamiento dictado contra éste – que fue detenido en marzo de 2010 e ingresado en prisión, de la que salió después en libertad – está dentro de la legalidad, ya que fue dictado por un presunto delito de abusos sexuales, además de varios supuestos delitos contra la Administración de Justicia.

La fiscal señaló también que los hechos presuntamente cometidos por el denunciado son de tal gravedad que aunque finalmente no sean condenados con la pena de cárcel «lo que sí merece es que sea alejado de la Administración de Justicia». En otro momento de su intervención, la representante del Ministerio Público señaló que las presuntas relaciones sexuales completas mantenidas con una de las denunciantes configurarían el delito de abusos porque «el consentimiento de ella estaba viciado».

Por su parte, el abogado defensor del acusado manifestó que muchas de las mujeres que denunciaron los hechos en la sede de Comisiones Obreras (CC OO), sindicato que dio la voz de alarma, con posterioridad no los han ratificado ante la autoridad judicial. Añadió que varias se desdijeron de sus primeras manifestaciones incriminatorias y que otras solo reconocieron que el denunciado les había dirigido miradas insinuantes «pero sin que hubiera tocamiento alguno». Y comentó que su intervención en la posible agilización de los expedientes a cambio de mantener relaciones sexuales «no fue tal, porque los mismos estaban resueltos».

El área de Inmigración de CC OO fue el paño de lágrimas de algunas de las presuntas víctimas del funcionario. En febrero del pasado año, comenzaron a recibir la visita de mujeres que aseguraban estar siendo acosadas sexualmente cuando iban a tramitar su nacionalidad al Registro Civil. «Él las manoseaba, trataba de rozarse y de quedar con ellas fuera», aseguró una representante.

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