La Gendarmería marroquí, en colaboración con la Guardia Civil, han impedido por segundo día consecutivo la entrada ilegal en la ciudad ceutí de un grupo de unos 90 inmigrantes subsaharianos, los cuales querían lanzarse al agua para acceder por la frontera. Estas personas «asaltaron» nuevamente la playa del Tarajal provistos de chalecos salvavidas, cámaras neumáticas y otros utensilios para poder flotar. La Gendarmería marroquí acudió a la zona para evitar que los inmigrantes consiguieran su propósito.