Los recortes en materia de Bienestar Social no se contemplan. Eso sí, desde la Generalitat se actuará con «austeridad» y «prioridades» en la gestión del gasto, según declaró ayer el conseller de Justicia y Bienestar Social, Jorge Cabré. «Priorizaremos las necesidades pero lo básico – el sistema, la estructura y los presupuestos – se mantendrán», ha subrayado.

Pese a esto, según Cabré, la Conselleria «cubrirá» el coste de los recortes de las materias de bienestar social que el Estado dejará de financiar. Una cantidad que el responsable autonómico cuantifica en 13 millones de euros.

Según Cabré, estos recortes afectarán a las políticas en materia de igualdad y de inmigración que este año recibirán «cero euros» del Gobierno central. «La Comunitat invertirá lo necesario para no dejar de prestar atención a los inmigrantes », ha subrayado.

La Ley de Dependencia también se ve afectada. En este sentido, el conseller se ha referido a la «falta de colaboración» en la aplicación de esta ley y ha acusado al Gobierno de abonar «sólo el 25% del gasto en Dependencia» cuando «están obligados legalmente a abonar el 50%». «La Generalitat sufragará este año 330 de los 440 millones de euros» que según sus datos supondrá la Dependencia, ha explicado.

También ha criticado la reducción «progresiva» de las aportaciones que la Comunitat recibe del Estado y ha pedido al PSPV que «haga valer su amistad» con la ministra de Sanidad para que no «paralice» a los valencianos.

Sobre la reunión que presidió ayer del Consell Valencià de Benestar Social, ha declarado que ha sido «una primera toma de contacto» y que la semana que viene desgranarán «la linea de trabajo a seguir».