Bruselas permite a España imponer a los rumanos un permiso de trabajo

Las asociaciones de extranjeros en España critican que la nueva norma no se enfrenta a la economía sumergida

Diario de Navarra, COLPISA. OTR PRESS. MADRID, 12-08-2011

Ha recibido críticas de ser una norma xenófoba, que señala a los rumanos como culpables del paro entre los españoles, pero eso no ha impedido que la Comisión Europea haya dado luz verde a España para reintroducir la exigencia de que los ciudadanos rumanos que quieran trabajar en España dispongan de un permiso de trabajo.

En todo caso, el Ejecutivo comunitario ha advertido de que estará “vigilante” para asegurarse de que no se trata de una medida “desproporcionada”. Las asociaciones de rumanos en España han criticado que la nueva ley “tiene un carácter llamativo” y no se enfrenta al problema de la economía sumergida.

España podrá exigir a los rumanos que quieran entrar en territorio nacional un permiso de trabajo. En todo caso, no se verán afectados los ciudadanos de ese país que ya están en España trabajando, asalariados o por cuenta propia, o que estén inscritos en la oficina de empleo, ni tampoco sus familiares. Esta es la decisión que ha adoptado ayer la Comisión Europea, a petición de España.

El mercado laboral

Al autorizar la medida española, el Ejecutivo comunitario ha justificado la decisión por “las graves alteraciones del mercado laboral español”, pero en todo caso sólo estará en vigor hasta finales del año próximo. Además, ha aclarado que no podrá verse afectado ningún otro derecho comunitario que asiste a los ciudadanos rumanos.

El Gobierno español notificó al Ejecutivo comunitario el pasado 28 de julio su intención de reintroducir los permisos de trabajo para los ciudadanos de este Estado miembro. En un primer momento, Bruselas advirtió de que no se podían reintroducir restricciones a un país de la UE al que se le habían retirado anteriormente, pero admitió que existen salvaguardas para situaciones concretas.

El argumento que ha utilizado la Comisión Europea para aprobar la norma europea parece dar la razón a quienes opinan, como las asociaciones de rumanos, que la decisión del Ejecutivo español les señalará como causantes del paro. Así, el Ejecutivo comunitario ha acudido al “aumento continuado de residentes rumanos en España y su alto nivel de desempleo, que ha tenido un impacto en la capacidad de España para absorber nuevos flujos de trabajadores”. Según Bruselas, “la caída sin precedentes del PIB español, que bajó un 3,9% entre 2008 y 2010, se ha traducido en la mayor tasa de paro en toda la Unión Europea”, que Eurostat cifra en un 21%, frente a una media del 9,1% en la UE.

Según los datos que maneja el Ejecutivo comunitario, la población rumana en España aumentó de 388.000 residentes a 823.000 entre 2006 y 2010, y se trata de un colectivo “fuertemente afectado por el desempleo”, con una tasa de paro del 30%. En total, 191.400 trabajadores rumanos en España quedaron en desempleo en el primer trimestre de 2011.

En su decisión, Bruselas ha valorado que España fue uno de los primeros países de la Unión Europea en abrir su mercado laboral a los rumanos.
En Navarra residen más de 7.100 rumanos

En la Comunidad foral, según los últimos datos disponibles, viven algo más de 7.100 rumanos. Se trata de la tercera nacionalidad más numerosa en Navarra, tras los marroquíes (10.471) y los ecuatorianos (7.911). En concreto, los ciudadanos rumanos suponen el 10% de los extranjeros, aunque en toda España dicho porcentaje es aún mayor, del 15%. En 2007 vivían en Navarra 3.000 rumanos y la cifra se dobló en 2010 a 6.600. El colectivo rumano, como el búlgaro, ha crecido en los últimos años, especialmente desde que en 2007 ambos países ingresaron en la Unión Europea y sus ciudadanos pasaron a ser europeos de pleno derecho, pudiendo circular libremente. Lo que no se sabe con exactitud es cuántos de los 7.100 rumanos que viven en Navarra están trabajando de manera regularizada. Las autoridades estiman que en el conjunto de los rumanos en España el paro afectaría a un 38%. En Navarra se estima que los inmigrantes en paro, de todas las nacionalidades, son unos 9.200.

Las asociaciones de inmigrantes creen que “ya no hay tantos rumanos como antes” y que incluso algunos están volviendo a su país al no encontrar trabajo.
CLAVES

1 Presencia en España: 825.000 personas. Entre 2006 y 2010 el número de personas de origen rumano en nuestro país pasó de 340.000 a 825.000. El flujo se redujo desde el comienzo de la crisis pero siguen constituyendo el grupo de ciudadanos extranjeros con mayor presencia en España.

2 Libre circulación y moratoria de siete años. Cuando Bulgaria y Rumanía entraron a formar parte de la UE, en 2007, se estableció una moratoria de siete años (hasta el final de 2013) que cada país podía aplicar para retrasar la implantación de la libre circulación de ciudadanos, una de las libertades fundamentales y fundacionales de la entidad supranacional. España liberalizó en 2009 la llegada de trabajadores rumanos. En la actualidad, otros diez países comunitarios limitan a determinados sectores de actividad o a la posesión de un permiso de trabajo su entrada al mercado laboral.

3 La economía sumergida, problema para el colectivo. El presidente de la Federación de Asociaciones Rumanas en España (Fedrom), Miguel Fonda, cree que la medida “tiene un carácter llamativo”, pero no se enfrenta al verdadero problema: la economía sumergida. Para Fonda, “el problema es el mercado no regulado de la economía sumergida”, y lo que tendría que hacer el Gobierno español es “establecer las condiciones” para que emerja esa economía “en negro”.

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