La denominada operación Feriante, puesta en marcha para evitar que los inmigrantes crucen el Estrecho escondidos en los cacharros de las atracciones de Feria, ha supuesto ya la detención de 36 personas, entre ellas ocho menores de edad.

El operativo se puso en marcha a las 06:00 horas de ayer en la conocida “calle del infierno” del Recinto Ferial, donde los agentes siguieron el desmontaje de las atracciones para impedir que los inmigrantes accedieran al interior.

Hasta las 20:00 horas de ayer, las fuerzas de seguridad inspeccionaron unos 130 vehículos de empresarios de atracciones.

La operación moviliza a más de 160 agentes tanto de la Policía Nacional como de la Guardia Civil y de la Policía Local, que están desplegados tanto por el recinto ferial como por las zonas aledañas al puerto de la ciudad. La Delegación del Gobierno señaló que en los dos últimos años ha habido un importante descenso, cifrado en torno al 50 por ciento, en el número de inmigrantes interceptados.