Son jóvenes, inquietos, responsables y, lo más importante, tienen algo que decir. Y el Espai Jove Garcilaso les da la oportunidad de expresarse haciendo aquello que más les gusta: productos audiovisuales. Todo empezó con El culebrón del barri, en el 2009, una miniserie que rodaron los responsables de este espacio con la colaboración de adolescentes que ejercieron de actores, directores, cámaras, etcétera… El resultado fue fabuloso, por eso pronto se pusieron a pensar en otro proyecto que estuviera a la altura de tan exitoso precedente.

Y así nació Kdm, una serie que abordará la visión que tienen los adolescentes de la convivencia con otras culturas. «La gran diferencia con el anterior proyecto es que en esta ocasión queremos transmitir un mensaje concreto», explica Pablo Herrera, responsable de los proyectos audiovisuales del centro. Él, junto con la directora del Espai Garcilaso, Alicia Aguilera, detectaron la necesidad de poner esta temática sobre la mesa porque, según Aguilera, «no hay muchas investigaciones sobre inmigración y adolescentes».

Precisamente este mensaje de fondo fue uno de los motivos que llevaron a Eric Dexeus a enrolarse con la tripulación de este barco. «La inmigración no es un problema sino una virtud, porque nos aporta muchas cosas nuevas», cuenta este joven que, con tan solo 18 años y gracias a la experiencia que le ha brindado el Espai Jove Garcilaso, hoy trabaja en la productora Llums de Barcelona y estudia Comunicación Audiovisual. «Somos capaces de ir a cenar un kebab con toda normalidad y en cambio hay otros aspectos que no hemos superado», cuenta Dexeus.

Con Kdm tienen un mensaje que contar y, además, en este nuevo proyecto ha cambiado la metodología, ya que los propios jóvenes han asumido una responsabilidad mucho mayor que en el culebrón. «Nos dimos cuenta de que teníamos que dar más protagonismo a los chicos, darles más espacios para trabajar y expresarse», explica Herrera. Y para ello llamaron a algunos de los jóvenes que habían participado en el primer proyecto y les pidieron que se incorporaran a esta nueva iniciativa. Así nació el Grup Motor, el equipo encargado de hacer los castings, rodar y lanzar al mercado la serie. Mañana termina el plazo para que los interesados envíen los vídeos promocionándose a sí mismos, en septiembre comenzará el proceso de producción y Kdm saltará a la red el próximo año.

Jofre T. es uno de los miembros del Grup Motor. Tiene 16 años y quiere ser técnico de iluminación. Está muy implicado con Kdm, sobre todo, dice, porque aquí le han dado la oportunidad de opinar: «Gracias a esto puedo practicar y adquirir experiencia y, además, sentimos muy nuestro el producto».

«Les damos la oportunidad de expresarse y eso es una garantía de éxito», explica la directora del centro. Desde luego les ha dado resultado, porque ya han recogido un centenar de vídeos. «Lo dificil a partir de ahora será elegir a los participantes, porque todos valen la pena», dice Dexeus.