La inmigración se cobró ayer su enésima tragedia , esta vez en aguas de Marruecos. La Brigada de Extranjería de la Policía Nacional de Motril (Granada) investiga la posible desaparición en esa zona de entre cinco y seis personas, entre ellas un niño, que supuestamente viajaban en una expedición de inmigrantes subsaharianos que fue rescatada en Motril en la madrugada de ayer. La madre de la criatura habría perdido a su hijo de entre los brazos por un golpe de mar. Fuentes policiales precisaron a Efe que, según las declaraciones de los rescatados, estas personas pudieron desaparecer unas horas antes de ser localizados por las Fuerzas de Seguridad.

Los inmigrantes aseguran que entre los que cayeron al agua habría dos o tres hombres y dos mujeres, además de un niño de corta edad que viajaba junto a su madre y otro hermano, que sí llegaron a su destino.

Estas desapariciones, según apuntaron fuentes de Salvamento Marítimo, no han podido ser verificadas, ya que todos los datos que tienen, anteriores al suceso, apuntan a que en la embarcación iban de 52 a 54 personas, según un informante que llamó desde Marruecos.

El avión Sasemar de Salvamento marítimo, localizó la embarcación a unas 52 millas al Sur de la costa granadina a la una de la madrugada y después de que se estuviera buscando desde la tarde del pasado miércoles. Dos horas más tarde llegaba a la zona la Salvamar Hamal, que conseguía rescatar a 54 inmigrantes entre los que hay seis mujeres, dos de ellas en avanzado estado de gestación, además de dos bebés y al menos otros cuatro menores más, pendientes de ser sometidos a pruebas oseométricas, mientras que el resto son varones adultos.

Los inmigrantes llegaron al puerto de Motril pasadas las siete y media de la mañana. Les esperaba un dispositivo de la Cruz Roja, que les dispensó una primera atención médica y alimenticia, además de ropa seca. Tres de las víctimas, entre ellas las dos embarazadas, fueron trasladadas al Hospital comarcal Santa Ana