BILBAO. “Ojalá pueda seguir aquí
tan bien como hasta ahora”, dice
emocionado ante la cámara Soleymane,
un joven marroquí que está
haciendo un curso en el CIP de
Basauri de carpintería metálica. El
testimonio de Soleymane es uno de
los que aparecen en La vida de Alex,
un vídeo elaborado y protagonizado
por jóvenes inmigrantes que llegaron
a Bizkaia siendo menores de
edad y sin compañía. Con este
audiovisual, que ya está colgado en
Youtube, han querido cambiar “la
mala imagen que tenemos”. “Si esto
sirve para que la gente cambie de
opinión sobre nosotros”, dice el
joven que encarna a Alex en el
vídeo, “bienvenido sea”. Este vídeo
forma parte de un proyecto denominado
Todo el mundo es inmigrante,
que ha sido impulsado por
Edex, una ONG con un larga trayectoria
en la integración social, y
que ha contado con el apoyo de la
Diputación Foral de Bizkaia.
El verdadero nombre de Alex es
Issouf, un joven nacido en Guinea
Conakry hace 19 años. En el documental
interpreta a un chico de Costa
de Marfil, que llegó a Bilbao siendo
menor de edad. Pero su historia
es muy parecida a la de Alex. Aterrizó
en la capital vizcaina solo y
totalmente desprotegido. La única
alternativa que tenía para buscarse
la vida era vender cedés en la calle.

Pero estuvo poco tiempo en el circuito
de los top manta. La policía le
detuvo y acabó en un centro de acogida
de menores. Y allí cambió su
suerte. Tanto Alex como Issouf
supieron aprovechar las oportunidades
que les brindaron las instituciones
forales de protección al
menor. Issouf está realizando hoy
en día un curso de fontanería en la
Fundación Peñascal. “Cuando acabe
espero hacer prácticas y luego
que alguien me contrate”, dice.

Ese es el mismo objetivo que tiene
en mente Brahim, un marroquí de
19 años que salió de su país en los Issouf terminó en un centro de acogida
de la Diputación Foral de
Bizkaia. Actualmente está haciendo
prácticas de fontanería, tras lo
cual espera conseguir un puesto de
trabajo. “Nosotros”, dice Brahim,
“lo único que queremos es trabajar
para podernos asegurarnos un
futuro”. ¿Piensas volver aMarruecos?,
le preguntamos. “No”, contesta
de forma rotunda. “Solo quiero
trabajar para poder ayudar a mi
familia con el dinero que les pueda
mandar”, señala.

VÍDEO Braim, al igual que Issouf,
Ahmed, Collins y Mohammed, ha
disfrutado con la elaboración del
vídeo. “Nos lo hemos pasado muy
bien”, dice sonriente mientras su
compañero de rodaje Collins corrobora
con un gesto la afirmación de
Braim.

La idea de rodar un audiovisual
con testimonios de jóvenes inmigrantes
nació en el seno de Edex.

Una de sus responsables, Bruna
Nunes, destacó ayer, durante la presentación
del vídeo, que “el proyecto
surgió de la vulnerabilidad social
que sufren estos chavales”. Entre
sus objetivos figuraban el de “crear
espacios de aprendizaje que potencien
la participación de menores y
jóvenes en un contexto de inmigración
sin referencias, fomentando su
visibilidad en clave positiva”.

En definitiva, lo que pretendían
con este audiovisual era combatir
la mala imagen que tienen los
menores inmigrantes, sobre todo,
los procedentes del Magreb. “Queremos”,
dijo Bruna Nunes, “que se
reflexione sobre el proceso migratorio
así como la integración de
estos jóvenes en la sociedad”. También
pretendían que los participantes
en la experiencia aprendieran
a utilizar los medios audiovisuales
“como forma de expresión y
comunicación”. Al mismo tiempo,
la responsable de Edex destacó que
“era el momento de reflexionar
sobre los medios de comunicación
de cara a fomentar una visión crítica”.

ELABORACIÓN Para la elaboración
del vídeo contaron con la colaboración
del programa Hemen, una plataforma
de entidades y organizaciones
creada especialmente para
atender a este colectivo en Bizkaia.
Respecto al perfil de las personas
participantes en el vídeo, Bruna
Nunes señaló que “desde un principio
el proyecto fue diseñado para
atender a menores y jóvenes en un
contexto de migración sin referente
familiar”. “La idea”, dijo la responsable
de Edex, “era ofrecer un
recurso que les permitiera contar
sus historias, expresarse y reflexionar
sobre las dificultades que
encuentran y lo que sienten”.

bajos de un camión. Al igual que Para tomar parte en el proyecto
solo se les exigió a los jóvenes participantes
que tuvieran un nivel
básico de castellano para expresarse
bien ante un micrófono y que
estuvieran realizando algún curso
formativo. Por otra parte, para un
desarrollo adecuado de los talleres
era “fundamental contar con jóvenes
que tuvieran sus necesidades
cubiertas, lo que facilitaría una
asistencia regular a las sesiones
programadas”.

Y fueron muchas. El proyecto ha
durado cinco meses. Antes de iniciarse
el rodaje hubo muchas sesiones
de “conocimiento y trabajo”. El
resultado es un pequeño documental
de casi veinte minutos de duración
en el que cinco jóvenes cuentas
sus historias y, a su vez, se convierten
en improvisados periodistas
que les preguntan a sus compañeros
de clase. En total, aparecen
una docena de testimonios. Casi
todos en la misma línea. Se muestran
satisfechos con lo que están
haciendo, cursos de formación en
la Fundación Peñascal y en el CIP
de Basauri, y deseosos de acabarlos
para integrarse en el mundo laboral.

Para la elaboración del vídeo no
ha sido necesaria una superproducción.
Tal y como resaltó Bruna
Nunes, “las sesiones de taller las
realizamos en las instalaciones de
la Federación Sartu y los recursos
técnicos que hemos utilizado han
sido: una cámara de vídeo, un trípode,
micrófonos, ordenadores con
acceso a internet y un cañón para
proyección de vídeos y reportajes”.
YOUTUBE El uso de esos recursos
técnicos les ha permitido que el
vídeo resultante se pueda ver en
internet en la dirección www.youtube.
com/user/todomundoinmigrante.

Ese es precisamente uno de
los objetivos del proyecto y de sus
protagonistas. Collins, nacido hace
20 años en Ghana, confía en que
“con este vídeo se nos mire de otra
forma”. Y como dijo antes de la presentación
del audiovisual Fermín
Barceló, exresponsable del área del
menor del Ararteko, “el vídeo rompe
con esa mala imagen social que
se transmite en los medios de comunicación
de este colectivo”.