El Ararteko ha lanzado una advertencia contra los clichés y tópicos xenófobos que parecen estar calando en los últimos tiempos en la sociedad vasca, un fenómeno habitual, por ejemplo, en foros de Internet en los que, sea cual fuere el tema social que se aborde, usuarios no identificados aparecen en los debates vinculando a los extranjeros con el cobro irregular de subsidios, utilizando muchas veces un lenguaje muy similar.

En el informe anual que presentó ayer en el Parlamento vasco, Íñigo Lamarca calificó de «alarmante» el discurso que – sin apoyarse en ningún «estudio riguroso» – responsabiliza al colectivo inmigrante del «uso abusivo y fraudulento» de los servicios públicos y las prestaciones económicas, cuando no asocia a los foráneos de forma indiscriminada con la delincuencia.

Según el ‘ombudsman’ del País Vasco, esos lugares comunes se han extendido por Euskadi al calor de la crisis económica y son «preocupantes» porque pueden deteriorar la convivencia y la cohesión social, y al mismo tiempo pueden afectar a las políticas públicas de inmigración e integración. Lamarca «echa de menos» la creación de algún consejo asesor audiovisual independiente o la aplicación de códigos deontológicos en los medios de comunicación que ayuden a evitar «la estigmatización» de los ciudadanos «por el origen nacional o la etnia de las personas inmigrantes».

«Deficiente atención»

El informe del Ararteko recuerda, por otra parte, que el Gobierno vasco todavía no ha elaborado el III Plan de Inmigración y resalta que, en 2010, uno de los hechos significativos que se registraron en Euskadi en esa materia fue la «supresión del servicio Heldu», un órgano de asesoramiento jurídico a los ‘sin papeles’. «Aunque se han dado pasos en cuanto al diseño del nuevo modelo – dice el ‘ombudsman’ – aún es pronto para una valoración sobre su alcance». «El Ararteko – prosigue – sigue recibiendo quejas con relación a la carencia y/o deficiente atención jurídica a las personas extranjeras en situación irregular, por lo que a lo largo de 2011 haremos un seguimiento al nuevo modelo».

Lamarca informa de que el año pasado realizó 6.446 actuaciones, lo que supone un incremento del 3,75%. Los expedientes abiertos a instancias de ciudadanos sumaron 1.859, un capítulo en el que se apreció el aumento de las reclamaciones relacionadas con prestaciones como la renta de garantía de ingresos o las ayudas de emergencia social (AES). Según el informe, la mayor parte de las quejas sobre las AES se refieren a la duración de los trámites para solicitarlas o a la supresión del subsidio, al haber considerado la Administración que no se cumplen las condiciones para cobrarlo.

Las intervenciones del Ararteko con personas en situación o riesgo de exclusión social ascendieron a 78. En este sentido, Lamarca instó a las instituciones a responder en esos casos con «la mayor diligencia» posible.