Continúa el cambio de tendencia evidenciado en los datos del pasado año en Barcelona, cuando por primera vez en una década descendió el número de inmigrantes residentes en la ciudad. La crisis sigue desalentando muchas llegadas y a la par continúa expulsando a muchos que no han podido superar la precariedad a la que se han visto abocados por el desempleo. Con este panorama, a 1 de enero del 2011 la población extranjera vuelve a disminuir por segundo año, esta vez un 2,3% (frente al 3,5% del 2010), lo que representa 6.312 foráneos menos. Son cifras de un informe estadístico que ayer hizo público el ayuntamiento y que reducen a 278.320 el número de inmigrantes residentes en la capital catalana, el 17,3% del total de empadronados.

Otro dato que confirma la tendencia a la baja en el flujo de llegadas es la importante reducción del número de solicitudes de reagrupamiento familiar recibidas. En el 2010 fueron 4.156, un 9,7% menos que en el 2009, unas cifras que quedan muy distantes de las cerca de 7.000 peticiones del 2008.

Entre otros indicativos que recoge el informe municipal destaca el que continúa la tendencia a la mezcla entre la población, ya que aumenta de nuevo el número de parejas mixtas y de los nacimientos fruto de estas. En el 2010, el 31% de los matrimonios celebrados en Barcelona fue entre una persona extranjera y una española, frente al 28% del año anterior. El 13,7% de los nacimientos fue fruto de parejas en las que el padre o la madre era foráneo.

El avance estadístico también detalla la procedencia. Así, el colectivo más numeroso, con un 41% del total, es el latinoamericano, seguido del de la Unión Europea, con el 27%; de Asia, con un 21% y del resto de Europa, con un 5%. Al analizar los datos, no obstante, hay que tener en cuenta que el 48% de los italianos residentes en Barcelona son nacidos en Latinoamérica (principalmente Argentina, Uruguay y Brasil), por lo que se relativizan las estadísticas de residentes europeos.

Por nacionalidades, la mayoría de extranjeros empadronados son originarios de Pakistán (22.342), con un aumento de unos 4.000 ciudadanos en el último año. De la misma manera, aunque en menor medida, han aumentado los ciudadanos de China, Bangladés, Honduras y Paraguay. Por contra, tanto los procedentes de Italia como los de Ecuador (que ocuparon el primer y el segundo puesto en el ranking del 2010) han bajado una posición y se sitúan en 22.002 y 17.966 ciudadanos respectivamente. También desciende la población francesa y brasileña.

En cuanto a la distribución por distritos, se confirma también el descenso y el gradual reparto de la población extranjera en todos ellos, de la misma manera que ha disminuido en 50 de los 73 barrios de la capital catalana.

DISTRIBUCIÓN /Ciutat Vella, con 40.938 foráneos (343 menos que un año antes), sigue teniendo de largo el porcentaje más elevado de población extranjera de toda la ciudad, ya que representan el 40,5% del total de residentes, seguido de Sants-Montjuïc (19,2%) y del Eixample (17,4%). Sarrià-Sant Gervasi, con un 10,8% de foráneos, y Les Corts, con un 11,1%, se mantienen como los territorios con menos población inmigrante.

Con estos nuevos datos, el comisionado de Inmigración y Diálogo Intercultural del Ayuntamiento de Barcelona, Daniel de Torres, considera que «se consolida la década de integración, dejando atrás la década anterior que denominamos de acogida», y atribuye esta reducción a «la crisis económica, a los mayores controles y a la cooperación con los países de origen». El reto ahora, considera, es «impular políticas de integración que serán determinantes a la hora de tener un proyecto colectivo de ciudad, que es la base para garantizar la cohesión social».