Los comedores sociales de la ciudad ya se encuentran al límite de su capacidad
El Concello aporta 75.000 euros al año y garantiza que mantendrá esta ayuda
El País, , 11-03-2011La pervivencia de la crisis económica, con sus corolarios de incremento del desempleo y reducción del salario de aquellos que siguen trabajando, ha disparado la demanda de ayudas sociales básicas como la comida. Las entidades que prestan su labor en este campo llevan dos años observando como este fenómeno se mantiene, sin que por ahora existan visos de que se vuelva a la situación precedente.
Aunque la mayoría lo ignora, miles de familias y numerosas personas por libre logran sobrevivir gracias a la ayuda que reciben de entidades como Afan, Comedor de la Esperanza, Vida Digna, Banco de Alimentos o los Hermanos Misioneros de los Enfermos Pobres. Sus responsables reconocen que están al límite y que con los medios de que disponen no pueden hacer más.
Y es que a lo largo del 2010 la demanda ha subido en torno a un 30% en aquellos casos en que existe posibilidad de incremento. Otros, como la residencia de los Enfermos Pobres de Teis, tiene ocupadas sus plazas y tienen muy difícil ampliar su labor. No obstante, el hermano Antonio Donaire explica que han tenido que habilitar como dormitorio un salón del recinto «en el que hemos colocado una veintena de sillones adaptables ya que las 160 plazas del albergue están cubiertas de manera permanente. «Además de los alojados atendemos a unas 1.800 personas cada mes y cuando todo está lleno procuramos siempre hacer un hueco. Un viernes por la noche nos aparecen unas personas con una niña de dos años, ¿qué hacemos, los dejamos en la calle?». Por este motivo eleva a unos 3.500 euros el dinero diario que necesitan para mantener la instalación.
Voluntarios
En estas condiciones, la asociación Afan reconoce que ante tanta demanda «sin las ayudas oficiales tendríamos que cerrar», afirmó ayer en la prórroga de un convenio con el Concello, que por medio de la concejalía de Benestar Social les ha garantizado 150.000 euros para las cinco entidades a percibir durante dos años.
Y no solo precisan dinero, como reconoce el Banco de Alimentos. «En ocasiones estamos desbordados y nos vendría muy bien contar con más voluntarios para poder llevar adelante las operaciones kilo con las que obtenemos la comida que luego repartimos». La solidaridad en este campo es vital, y al parecer no solo se mantiene sino que crece. A modo de ejemplo, el año pasado esta organización recolectó un millón de kilos de alimentos «una cifra sensiblemente superior a los 706.000 del 2009».
Además de aumentar las peticiones de ayuda ha variado sensiblemente el perfil de los demandantes. «Hay muchas familiar normales que cuentan con una pequeña ayuda económica de 400 o 500 euros con la que pagan el piso, pero necesitan todo lo demás para sobrevivir», explica la responsable de Afan. Como dato, señalar que esta asociación presta ayuda periódica a 402 familias, en total algo más de 1.100 personas, a las que le entrega bolsas de alimentos dos veces al mes. «Esperamos que la situación mejore y podamos ampliar a tres las entregas mensuales», explican.
Siguiendo con las cifras, el Comedor de la Esperanza daba de comer diariamente a 70 u 80 personas, y en el último año la cifra ha subido en casi un 50%. «Y ya no son mayoritariamente inmigrantes o transeúntes, como ocurría antes. Ahora muchos son gente de aquí, parados y gente a la que la vida le va mal», explican.
Labor impagable
Cuando llega el fin de semana la asociación que más trabajo tiene es Vida Digna, que además de otras actividades mantiene un comedor sábados y domingos. «Normalmente acuden hasta 200 personas, agotando las plazas de que disponemos», explica Ricardo Goitia. A mayores, dos días por semana entregan bolsas de comida mensuales a un millar de familias.
Ante este panorama el teniente de alcalde Santiago Domínguez calificó dicha labor de «impagable». Por este motivo garantizó que el Concello nunca reducirá las aportaciones con esta finalidad. «No futuro poderá haber recortes, pero nunca nestas áreas, e desexaríamos disponer dun maior presuposto», afirmó el edil nacionalista.
Convenio bianual
El teniente de alcalde Santiago Domínguez renovó ayer el convenio por el que cinco entidades sociales recibirán en total 150.000 euros del Concello a lo largo de dos años.
Apoyo valioso
La responsable de Afan agradeció esta colaboración pues «sin este apoyo, y el de otras entidades?tendríamos que cerrar». Domínguez reconoció que «non é unha gran cantidade nin a mínimamente necesaria, pero hai moitas asociacións».
Miles de familias reciben en Vigo bolsas de comida de asociaciones solidarias
(Puede haber caducado)