El servicio de Inmigración del Ayuntamiento de Zarautz anunció ayer la creación de una mesa de trabajo para impulsar la buena acogida de los nuevos vecinos, así como la convivencia basada en el respeto y el fomento de la diversidad cultural. Según explicaron la concejala de Acción Social, Maribel Albizu, y el técnico Julen Aranguren, la mesa recogerá propuestas y trabajará medidas “para favorecer la integración social de los inmigrantes (el 7% de la población en Zarautz), siempre con los mismos derechos y deberes y obligaciones que los zarauztarras”.

El nuevo órgano tratará de impulsar la convivencia entre los recién llegados y los autóctonos, y se constituye como un foro de reflexión en el que se tratará el fenómeno migratorio en la localidad, la acogida de las personas extranjeras, y la diversidad cultural. Servirá además para organizar actividades en el municipio que impulsen dicha diversidad, y para hacer seguimiento del Plan Local de Inmigración de Zarautz, aprobado recientemente. Dicho plan, se elaboró con la participación de unas 70 personas, entre particulares, agentes y asociaciones del municipio. La mesa seguirá la misma filosofía abierta: se hará una invitación expresa a asociaciones de Zarautz que trabajan en este ámbito, y podrán participar también todos los ciudadanos de la villa interesados en hacerlo a título individual. Para ello, deberán llamar al 943 005 127 o escribir a la siguiente dirección: jaranguren@zarautz.org.

cada mes y medio La mesa se reunirá cada mes y medio, salvo que los integrantes consideren que tienen que reunirse con mayor frecuencia, por ejemplo, para organizar alguna actividad. Se solicitará un compromiso de trabajo y asistencia a las personas participantes. Así, la primera reunión tendrá lugar el próximo miércoles, día 16, a las 19.00 horas.

Albizu y Aranguren subrayaron que en los últimos meses se han organizado distintas reuniones de trabajo con ciudadanos y asociaciones, por ejemplo, para organizar Zarauztik Mundura (la fiesta de las culturas), pero la nueva mesa tendrá una perspectiva más general y servirá además para hacer un diagnóstico de cómo percibe la ciudadanía el hecho migratorio. Así, se trabajará también la sensibilización y la adaptación de la sociedad de acogida, porque es un proceso bidireccional.