SÍLVIA OLLER – Salt

Se quiere mejorar el nivel de los idiomas y el vínculo de los jóvenes al deporte y el ocio
Las administraciones invertirán 373.000 euros en Salt durante un año para mejorar la convivencia y la cohesión social del municipio. El conseller de Benestar Social i Família, Josep Lluís Cleries, y la alcaldesa de Salt, Iolanda Pineda, anunciaron ayer la inversión inicial del plan de choque y desgranaron algunas de las actuaciones que se llevarán a cabo para reforzar los planes de acogida y de integración del Consistorio.

La inversión, aportada por la Generalitat y la Unión Europea, se destinará a programas de acogida lingüística, a fomentar la participación de menores en el deporte y en el ocio y a la inclusión de personas extranjeras en las entidades del municipio, a tareas de alfabetización ya mejorar la cohesión social en las aulas. En definitiva, será un dinero que servirá para reforzar lo que ya venían haciendo el Ayuntamiento y otras entidades del municipio, desbordadas en muchas ocasiones por la falta de recursos y de personal.

Un trabajo que en los próximos meses “se debe notar en la calle, en el día a día de los ciudadanos de Salt”, aseguró el conseller Josep Lluís Cleries. La alcaldesa de Salt, Iolanda Pineda, pidió que este paquete de medidas tenga continuidad en el tiempo.

La de ayer, que fue la primera reunión entre ambas partes después de la quema de vehículos y contenedores por un grupo de jóvenes hace un par de semanas, permitió concretar algunas de las medidas de un plan piloto, destinado a reforzar la convivencia y cohesión. Como ya avanzó el conseller hace unos días, los principales beneficiarios de este primer paquete de medidas serán jóvenes y adolescentes. Uno de los aspectos que más controversia había generado era la ubicación del Centro Residencial de Acción Educativa (CRAE), en el que residía el joven de 16 años que murió al caerse por la claraboya de un quinto piso mientras huía de la policía tras robar una moto. Muchas voces han pedido en más de una ocasión, que el CRAE, que atiende a niños y adolescentes y que está ubicado en la zona más conflictiva del municipio, se emplace en otro lugar. Ayer, Cleries desligó el trágico suceso con el hecho de que el joven residiera en un CRAE. “En Catalunya, hay 7.000 niños bajo la tutela de la Generalitat. Lo ocurrido ha sido un hecho muy puntual, que no tiene porqué volver a ocurrir”, dijo. No obstante, el conseller señaló que sería bueno “buscar otros entornos, más rurales”, para acoger los jóvenes adolescentes y dejar el centro de Salt para niños de más corta edad.

Al margen de las acciones anunciadas ayer, una comisión formada por la Generalitat y el Ayuntamiento se encargarán de hacer un seguimiento de las actuaciones y de proponer otras medidas que deben complementar el plan. A finales de esta semana, el delegado de la Generalitat en Girona, Eudald Casadesús, se reunirá con miembros de las conselleries de Benestar, Ensenyament, Territori i Sostenibilitat, Interior y Empresa i Ocupació para dibujar las acciones a corto, medio y largo plazo que necesita el municipio.

El plan piloto de Salt, que se firmará en la primera quincena de febrero, es el primero de los diseñados por el Govern para municipios que tienen un elevado índice de población inmigrante. Localidades como l´Hospitalet de Llobregat, Badalona, El Vendrell y Terrassa también serán incluidas. La Unión Europea aportará en total para los cinco municipios dos millones de euros y la Generalitat, medio millón.