BILBAO. Los recientes anuncios del departamento de Asuntos Sociales dirigido por Gemma Zabaleta de limitar y en su caso recortar las prestaciones de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) y de las Ayudas de Emergencia Social (AES) han provocado una honda preocupación y malestar entre los afectados y puesto de manifiesto la improvisación en esta materia del Gobierno Vasco que ha actuado de forma unilateral y sin contar con las instituciones (diputaciones y ayuntamientos) directamente afectadas. En este contexto, el PNV se ofrece al Gobierno de López para alcanzar un acuerdo sobre servicios sociales que palíe la inacción del Ejecutivo vasco y que pretende garantizar la sostenibilidad del sistema.

El presidente de la formación jeltzale Iñigo Urkullu, anunció ayer que, ante “un nuevo discurso vacío” del lehendakari, en referencia al mensaje de fin de año emitido por ETB, su partido trabaja para proponerle un acuerdo en torno a la sostenibilidad de los servicios sociales. Un acuerdo que se sumaría al ofrecido hace más de un año en materia fiscal en el marco del acuerdo presupuestario y de estabilidad institucional firmado con vistas a los Presupuestos de 2010.

Urkullu censuró que el discurso de López tampoco recogiera propuestas para salir de la crisis en un año en que “su Gobierno ha multiplicado la deuda por seis, ha alejado a Euskadi del equilibrio presupuestario que se está exigiendo en Europa”. Además, criticó que López “ha aplazado todos los proyectos de ley de su calendario”, en referencia al retraso de veinte iniciativas anunciadas en su calendario legislativo. Asimismo, censuró la actitud del Gobierno socialista que ha rechazado las más de 1.300 enmiendas parciales que presentó la oposición a los presupuestos de López, de las que sólo fueron aceptadas seis.

Con todo eso, Urkullu consideró que Patxi López “volvió a perder una oportunidad para comprometer lo que no ha hecho” y esa ausencia de iniciativa es la que genera “falta de confianza” de los ciudadanos en su Gobierno. Asimismo, expuso que en su mensaje, el lehendakari no citó la transferencia de las políticas activas de empleo a Euskadi que es, a su entender, “la única noticia positiva con que se inicia este año”.

Por todo ello, Urkullu anunció que su partido trabaja para proponer al lehendakari una nuevo acuerdo, como fue el marco de estabilidad institucional que los nacionalistas plantearon el año pasado al PSE. En concreto, explicó que llevarán a la formación liderada por Patxi López una propuesta concreta “para alcanzar un acuerdo en la sostenibilidad de los servicios sociales, la política fiscal, así como las políticas públicas”. El burukide jeltzale le ha dicho al lehendakari que su formación está dispuesta a acordar y que disponen de todo el año para lograrlo.

GESTIÓN POLÉMICA El anuncio de Urkullu llega en un momento en el que las iniciativas estrella del departamento vasco de Asuntos Sociales se han visto salpicadas de una fuerte polémica tras haber ordenado la supresión de las rentas sociales a 6.232 familias en el mes de diciembre y tras negar la ayuda de emergencia social a quien tenga más de 8.000 euros. Estas dos polémicas recientes han sucedido a otra anterior relacionada con la retirada de las subvenciones a Hobetuz, por las acusaciones contra el servicio jurídico – social para inmigrantes, al asegurar Zabaleta que Heldu escondía “algo ilegal” en su contratación.