Bilbao. Instituciones, partidos políticos y asociaciones condenaron ayer de forma unánime la agresión que sufrió en el metro el pasado martes una mujer de origen paraguayo. Todas las voces claman por que no se vuelva a repetir este tipo de acciones xenófobas.

El Gobierno vasco, por ejemplo, a través de la Dirección de Inmigración, ha pedido a la ciudadanía que “no mire para otro lado y no permita que estos comportamientos brutales se queden sin un contundente reproche social”. En este sentido, la Asociación de Paraguayos Guaraní Tetagua denunció que en el momento de producirse la agresión el metro iba lleno de pasajeros y que “nadie auxilió a la mujer ni alertó a la Policía”. Esta asociación critica que “este tipo de conductas racistas atentan contra la convivencia normalizada” y ha pedido que “se deje de estigmatizar a un sector de la ciudadanía por el mero de su origen”.

SOS Racismo, por su parte, acusó a los políticos y a los medios de comunicación de crear “un caldo de cultivo racista que propicia las agresiones a inmigrantes”. Para esta asociación, este tipo de agresiones no pueden verse como “sucesos aislados”, sino que obedecen a las “políticas racistas que promueven las instituciones” y a los “prejuicios que alimentan los medios de comunicación, la clase política y demás agentes sociales”.

El Ayuntamiento de Bilbao denunció que las conductas racistas “atentan directamente contra los valores esenciales de la convivencia pacífica ciudadana como son el respeto esencial a los derechos humanos de las personas, la libertad, la igualdad, la tolerancia o la solidaridad”. Desde el Consistorio señalan que “la ciudadanía bilbaina está formada por todas y cada una de las personas que deciden vivir en nuestro municipio sin que quepa realizar ningún tipo de distinción por motivos de raza, religión, origen nacional o sexo”. Desde el Ayuntamiento condenan “cualquier acto que suponga la vulneración a este principio de igualdad”. La concejal Julia Madrazo señaló que “tenemos que levantar la voz y decir claramente que no toleramos ningún tipo de violencia y que rechazamos estos comportamientos fascistas”.

Emakunde mostró su más “profundo rechazo” a la agresión y considera que “tras el carácter claramente xenófobo de la acción se esconde también un trasfondo de violencia contra las mujeres”. El Instituto Vasco de la Mujer recuerda que esta agresión en el metro se ha producido “precisamente en la semana que se ha celebrado el Día Internacional contra la Violencia a las Mujeres”.