El racismo hoy
Deia, , 25-11-2010En Latinoamérica, a principios de la conquista, se pensaba que los nativos no eran seres humanos y no tenían alma. Sus costumbres eran tan diferentes que no las podían entender y, mucho menos, tolerar. Por eso justificaban la explotación y, la esclavitud y desigualdad. Después de las guerras de independencia, la esclavitud fue abolida y poco a poco se fueron reconociendo a los pueblos indígenas con sus culturas y su dignidad humana. Aunque todavía falta mucho por hacer.
De seguro es conocida por todos la lucha de los negros en Estados Unidos para obtener primero libertad y, más tarde, igualdad. Su esfuerzo valió la pena y se pueden ver sus frutos en la actualidad. Ahora, en ese país, discriminar a un afro – americano es un delito grave. Son ciudadanos estadounidenses y tienen los mismos derechos que les corresponden a todos. Me alegro por ellos y aplaudo el esfuerzo de sus ancestros y el que en muchas ocasiones realizan todavía por defender su dignidad.
Hoy, miles de hispanos cruzan la frontera para buscar una mejor vida del otro lado. Es en condiciones muy extremas y a gran riesgo de muerte. Los que consiguen son bajo condiciones reprochables, horarios explotadores y con salarios miserables. No pueden exigir seguro social ni justicia. Están separados de su familia y las personas que los rodean les son hostiles por el racismo que se genera.
El exsecretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Michael Chertoff, acusó hace tiempo a los inmigrantes diciendo que son una amenaza para el medio ambiente porque dejan desechos humanos, basura, botellas tiradas y otros artefactos en su camino por el desierto.
También existe un fuerte prejuicio sobre la criminalidad de los latinos. Son vistos cono un peligro para la seguridad. Si algunos jóvenes tienden a ser violentos es su reacción a la frustración que sienten porque se les deniegan sus oportunidades a la legalización y, por consiguiente, a un ascenso social.
La historia se está repitiendo, lo único que ha cambiado son las excusas para hacer parecer al racismo, racionalidad.
(Puede haber caducado)