El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se volvió a quejar al presidente de la Comisión Europea, Durão Barroso, por las últimas declaraciones de la comisaria europea Viviane Reding, en las que criticó la propuesta franco – alemana de reabrir el Tratado de Lisboa.

«Francia es Francia, nadie puede insultarla sin consecuencias y Reding ha insultado a Francia como nación», habría afirmado Sarkozy, según declaró el primer ministro húngaro, Víktor Urbán, tras una reunión de líderes del Partido Popular Europeo previa a la cumbre.

«Es la misma historia otra vez», habría añadido Sarkozy, según Orbán, en referencia a la reciente disputa entre Reding y el presidente francés por la expulsiones de gitanos rumanos y búlgaros de Francia.

La luxemburguesa Reding dijo el martes a un diario alemán que considera irresponsable la propuesta franco – alemana de reformar el Tratado de Lisboa, después de que este entrase en vigor hace poco menos de un año. «Nos hicieron falta diez años para lograr este Tratado. Así que sería irresponsable abrir la caja de Pandora», afirmó.

Estas afirmaciones no parecen haber gustado en el Palacio del Elíseo, que ya se quejó a Barroso cuando la responsable de Justicia en la CE criticó duramente las expulsiones francesas de gitanos rumanos y búlgaros.

Nicolas Sarkozy salió de la reunión sin hacer declaraciones y acompañando en el mismo coche a Barroso, sobre el que se deshizo en elogios.