Con el fin del verano los comerciantes de los municipios costeros de Castellón han comenzado a hacer balance y han visto como las cuentas no cuadran. A pesar de que el turismo se ha mantenido a buenos niveles las ventas, como es el caso de Peñíscola, han caído entorno a un 60%. Y, para ellos, el motivo es claro: el auge del ‘top manta’ en los paseos marítimos y en primera línea de playa. En esta localidad costera la desesperación llevó a un comerciante a grabar a un grupo de manteros para elevar su queja al Ayuntamiento, lo que le costó una paliza. Ahora todo el gremio se ha unido a su protesta. En otros municipios, como Oropesa, casi el 100% de los comercios han firmado un documento para exigir al Consistorio la eliminación de la ordenanza que da vía libre a los puestos ambulantes.

Pero estos días si hay un municipio que ha declarado la guerra a los llamados ‘manteros’ ha sido Peñíscola. El paseo marítimo de esta localidad acogió ayer una concentración donde participaron unos 40 vendedores de souvenirs y tiendas de la localidad para denunciar la práctica de la venta ilegal a los turistas. Según aseguran, este año ha sobrepasado todos los límites. «Además de incomodar a los bañistas o a los que están comiendo en las terrazas en ocasiones cuando huían han tirado por los suelos a turistas, han lanzado piedras a la policía y nos han amenazado», explicaba ayer una de las tenderas. «Para el colmo, cuando huyen de la policía se refugian en nuestras tiendas», señaló.

Y es que la lucha contra este fenómeno es más que complicada. A pesar de que los cuerpos de policía municipales han realizado centenares de actuaciones en este sentido, son muy pocas las veces que se termina con una denuncia. Mientras, las ventas de los comerciantes que pagan sus tasas por sus locales ven como sus ventas caen.

Según coincidieron dos vendedoras establecidas en el casco de Peñíscola, «este año las ventas han disminuido en los comercios tradicionales entre un 50 y un 60%». El hecho que ha colmado la paciencia de los vendedores fue la agresión a al compañero que grabó en vídeo cómo se hacía el negocio ilegal de noche en el paseo.

«Nos vemos desamparados por el Ayuntamiento y el Gobierno, mientras quienes tienen todos los derechos son los manteros», agregó esta comerciante que instó a las autoridades a actuar antes este problema. Los tenderos estimaron en miles de euros diarios las ganancias del ‘top manta’. Incluso apuntan que la base de estas redes están asentadas en dos viviendas de Llandells y del casco antiguo.

No obstante, la Policía Local ha denunciado la incapacidad numérica de atajar este problema. «Si los persigues y tiran a alguien al suelo eres responsable», explicaba ayer el jefe de la policía, José Antonio Soriano. «Nos hemos pasado aquí muchas horas disuadiendo y persiguiendo vendedores hasta Benicarló. La gente debería saber esto antes de hacer declaraciones», señaló.

Con la concentración de ayer, este gremio confía en que la situación sea corregida por las autoridades tanto locales como estatales y que se pongan medios para erradicar esta práctica.

Por su parte, el alcalde de la localidad, Andrés Martínez, lanzó balones fuera y pidió ayer la dimisión del subdelegado del Gobierno en Castellón, Antonio Lorenzo. En un comunicado manifestó que «el subdelegado no ha sabido ver el problema y no sabe qué hacer con él aun a día de hoy». Además, dijo que la lucha contra la mafias organizadas son competencia estatal. Por último aseguró que «el grupo popular en el Senado va a consultar qué avances prevé el Gobierno frente a esta problemática que tiene que ver con los delitos a la propiedad intelectual y la inmigración».

Firmas en Oropesa

Mientras, en Oropesa los comerciantes ya hicieron un llamamiento este verano, después de que el Ayuntamiento aprobara una ordenanza permisiva con los vendedores ambulantes. Tal y como anunció ayer Salomé Moreno, una de las afectadas, «la campaña ha ido muy bien y han firmado prácticamente todos los comercios». Así, adelantó que la próxima semana presentarán el documento en el Ayuntamiento para exigir medidas contra la venta ambulante.