E. Giralt
Educació ha reducido en Reus (Baix Camp) de tres a dos el número de aulas de acogida para inmigrantes recién llegados – los denominados EBE, Espais de Benvinguda Educativa-,ante la previsión de que se siga reduciendo la llegada de alumnos extranjeros. “El trabajo con los alumnos sigue siendo el mismo, pero los tres EBE son ahora innecesarios”, explica Zacarías Henar, responsable de la zona de Reus del Departament d´Educació. En Vic y Cornellà se mantiene este curso el EBE ya existente. Al final del curso pasado se detectó un descenso del porcentaje de inmigración y de la demanda de alumnos en las aulas de integración. En los EBE que Educació ha dispuesto por el territorio catalán (Reus, Cornellà de Llobregat y Vic), el año pasado se atendieron 254 alumnos, 14 menos que en el curso anterior. “Estamos muy satisfechos con su funcionamiento, ha quedado claro que no es un elemento de segregación, todo al contrario, es un potente recurso integrador”, destaca Henar. En Reus se atendieron el curso pasado 114 alumnos, 8 menos que un año atrás.

En las aulas de acogida los alumnos recién llegados reciben conocimientos básicos que facilitarán después el inicio de su proceso de escolarización en los distintos centros educativos. Además de aprender nociones básicas sobre cultura y lengua, en el EBE se trabaja con las familias para que conozcan los recursos sanitarios y educativos a su disposición en el país de acogida. “También se detectan problemas sanitarios, como posibles defectos de visión”, destaca Henar.

Reus fue pionera en abrir aulas de acogida para inmigrantes , en el 2008. En cada EBE trabaja un docente, un educador social y un técnico de integración social. El plazo medio de estancia de los alumnos también se redujo el curso pasado, pasando de 40 días lectivos en Reus, el curso 2008-2009, a 37 días el año pasado.