Embarazada y su hija sobrevivieron a masacre
El Universo, 04-09-2010Una mujer embarazada y su hija sobrevivieron a la masacre de 72 emigrantes latinoamericanos la semana pasada en México, según el ecuatoriano Luis Freddy Lala Pomavilla, que salvó su vida junto a un hondureño, cuyo testimonio fue entregado a la AFP ayer por el Gobierno de Ecuador.
“Eran 76 y había una mujer embarazada como de nueve meses y con una niña, pero a ella no la mataron, no sé a dónde se la llevaron, no la vi ahí”, afirmó Lala en la declaración.
Lala no precisó la nacionalidad de las dos sobrevivientes. “Cuatro personas quedamos salvadas y de ahí, el resto, todos murieron”, dijo a la prensa oficial Lala, un indígena de 18 años, durante su repatriación, el domingo último.
Lala Pomavilla señaló igualmente que en el hecho ocurrido en el estado de Tamaulipas (a 180 km de la frontera con Estados Unidos) fueron ejecutados cinco ecuatorianos, una información que ya había sido entregada por la Embajada de Ecuador en México, con base en su primer testimonio.
“Conmigo eran seis ecuatorianos y mataron a cinco”, dijo el sobreviviente, quien atribuyó la masacre a la banda narcotraficante de Los Zetas, que secuestró a los emigrantes la noche del 21 de agosto, cuando avanzaban hacia la frontera.
“Ellos estaban bien armados, no tenían pasamontañas, estaban vestidos normal. No nos pidieron nada, solo dijeron: ‘¿Quieres trabajar con nosotros?’, y nadie quiso trabajar con ellos, no nos dijeron nada más”, relató.
El sobreviviente, a quien se mantiene en un lugar secreto bajo resguardo policial, dijo igualmente que el hondureño que escapó a la matanza, lo hizo escondiéndose entre los matorrales del rancho, donde se cometió el crimen. “Había un amigo que no estaba muerto, estaba sano, que se escondió. Salí con el amigo, vi una lámpara que estaba muy lejos, corrí como diez kilómetros y el amigo se separó de mí pensando que yo me voy a morir y no iba a avanzar, me fue botando”, narró el hombre, quien sufrió una herida de bala en el cuello.
Seguimiento en Ecuador
El fiscal general del Ecuador, Washington Pesántez, anunció ayer que se enviaron las huellas dactilares de un grupo de ecuatorianos que presuntamente son parte de las víctimas de la masacre de 72 migrantes registrada en México, estado de Tamaulipas, hace una semana.
Asimismo, la Fiscalía informó que tiene ubicados y da seguimiento a varias personas en nuestro país, por tener vinculaciones con las bandas paramilitares de México que asesinaron a los 72 migrantes en el Estado de Tamaulipas.
Así lo afirmó Pesántez, al indicar que los fiscales encargados de las investigadores del caso poseen datos que les permite llegar a esa conclusión, cuyo detalle no lo darán a conocer para no entorpecer la indagación. Adicionalmente, dijo que la Policía Judicial tiene en seguimiento a varias personas vinculadas al tráfico de personas, delito considerado como de lesa humanidad. En este caso, dijo Pesántez, se trabaja en conjunto con México y otros estados.
Para avanzar en las investigaciones en nuestro país, agregó el funcionario, la próxima semana viajará a Cañar para revisar el estado de los procesos abiertos por el delito de coyoterismo, muchos de los cuales no avanzan o se archivan. Según los datos preliminares que maneja, sostuvo, existen 170 causas ingresadas por ese delito, 11 sentencias, 76 acusados y tres sentencias absolutorias.
Los Zetas
Mientras, soldados mexicanos mataron a por lo menos 30 supuestos miembros del cartel del narcotráfico Los Zetas, en dos tiroteos cerca de la frontera estadounidense. Veinticinco de los sospechosos murieron el jueves durante el allanamiento de un edificio en Ciudad Mier, estado de Tamaulipas. Los otros cinco fueron abatidos ayer en el vecino estado de Nuevo León.
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