El presidente de Rumanía, Traian Basescu, mostró ayer su comprensión por la postura de Francia en cuanto a la expulsión de cientos de gitanos rumanos, aunque destacó que el caso demuestra la necesidad de mejorar a nivel europeo la integración social de estas personas. «Entendemos la posición del Gobierno francés. A su vez, apoyo plenamente el derecho de todo ciudadano rumano a que se mueva libremente dentro de la UE», dijo Basescu, quien prometió «trabajar con Francia para encontrar las soluciones adecuadas para ambos estados y todos los ciudadanos». «Lo que sucede en París es una prueba de que debemos tener un programa de integración europea de los ciudadanos romaníes [gitanos de Europa del Este]», concluyó Basescu, desde la ciudad de Iasi (noreste de Rumanía), según informa Efe.