vitoria. La consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, anunció ayer que el Gobierno Vasco se personará como acusación particular en la causa por la agresión racista a cuatro trabajadores de origen senegalés en una empresa de Lantarón. En un comunicado, la gestora socialista subrayó que el Ejecutivo autonómico debe hacerse presente como parte interesada en aquellos procesos en los que “se ponen en juego valores especialmente relevantes para la convivencia y el bien común”.

En el caso de la agresión de Lantarón, consideró que existen “claros indicios” de que “el racismo y la xenofobia tuvieron una influencia decisiva” en el desarrollo de los hechos. Por ello, al ejercer la acusación particular, el Gobierno Vasco desea que las anteriores consideraciones se tengan en cuenta a la hora de juzgar la agresión. “Es un mensaje muy claro de contundencia en el reproche institucional y de tolerancia cero hacia comportamientos de esta naturaleza, motivados además por la xenofobia”, indicó Zabaleta.

A través del director de Inmigración, Miguel Angel González, el Gobierno Vasco trasladó el pasado martes a la comunidad senegalesa un mensaje de condena por la agresión, de solidaridad con los agredidos y, a la vez, de “calma y confianza en la Justicia”. En la reunión con representantes del consulado general senegalés, González tuvo noticia del estado de los heridos y de la preocupación que pesa sobre la su comunidad.