Finalmente son doce y no trece las personas que murieron arrolladas por un ‘Alaris’ en la estación de Renfe de Castelldefels el miércoles pasado, noche de San Juan. El juzgado de primera instancia de Gavà, que instruye el caso, recibió la confirmación oficial de los servicios forenses del Instituto de Medicina Legal, que verificaron que son doce las víctimas del trágico atropello, tal y como se dijo en un primer momento, pero que cambió un día después a trece.

El motivo de la equivocación obedece al mal estado en el que se encuentran los restos mortales de los fallecidos – se utilizaron 20 sacas para trasladarlos – , circunstancia que llevó a los forenses a pensar que había una persona más en la lista de difuntos. Concretamente, se contempló la hipótesis de trece víctimas porque se sospechaba que podía haber entre los cuerpos dos gemelos univitelinos – nacidos del mismo óvulo y por lo tanto con igual perfil genético – , cosa que finalmente ha sido descartada. Se barajó esta idea después de que una de las familias dijera que buscaba entre los desaparecidos a dos hermanos idénticos. Los exámenes de ADN son los que en último lugar han disipado las dudas.

Desde la Consejería de Justicia, en cambio, señalaron que hasta que no se termine de hacer todas las pruebas forenses no se podrá confirmar el número real de víctimas. Su responsable, Montserrat Tura, afirmó que preveía que estos análisis pudieran concluirse durante el día de hoy. Según explicó, la principal dificultad es saber a ciencia cierta que el conjunto de los restos mortales que se entregan a las familias pertenecen a la persona fallecida. Por ello, pidió paciencia a los parientes y amigos que por tercer día consecutivo se concentraron a las puertas del Instituto de Medicina Legal, donde las escenas de dolor se sumaron al agotamiento y la desesperanza por los días transcurridos sin información sobre sus seres queridos.

Y es que las identificaciones tienen su propio ritmo y la información llega a cuentagotas. Los forenses han identificado ya a once personas. Hay, por tanto, un cuerpo pendiente de establecer su filiación. Se trataría de una mujer de unos 30 años, de nacionalidad rumana, que no tiene familia en España. Se ha solicitado ayuda a la Interpol para acceder a datos de su familia en el país de origen.

Homenajes

Las víctimas recibieron ayer dos cálidos homenajes. Por un lado, vecinos de Castelldefels, la mayoría de origen latinoamericano, depositaron flores en la estación en la que sus compatriotas se dejaron la vida cruzando las vías. Por otra parte, en la estación del Arco del Triunfo, en Barcelona, el consulado ecuatoriano organizó un acto en memoria de los doce fallecidos.

Mientras, cuatro días después del siniestro, los diez heridos evolucionan de forma favorable. Dos de los que tenían un diagnóstico más grave han mejorado notablemente su estado, mientras que seis podrían recibir el alta en breve. «Otros dos siguen muy graves», explicaron fuentes sanitarias.

El ministro de Fomento, José Blanco, confirmó ayer que los primeros «avances» de la investigación ratifican la «imprudencia» como causa de la tragedia. El acto temerario de las víctimas de cruzar las vías a sabiendas de que está prohibido – a pesar del colapso que había en el apeadero – , ha sido señalado desde el primer momento como la razón principal de la tragedia, con independencia de que luego los cuatro informes que hay en marcha puedan encontrar otras responsabilidades. Entre ellas, la supuesta falta de información en los andenes, la presunta escasa visibilidad o que el paso elevado que hay en la estación, construido mucho antes que el subterráneo y que estaba cerrado, debía estar abierto.