Un grupo de chavales de la pedanía nerjeña de Maro jamás olvidará la noche del pasado martes, cuando se encontraban pasando un rato en la recóndita e inaccesible playa de La Caleta, en pleno paraje natural de los acantilados de Maro – Cerro Gordo. De pronto, vieron llegar a una pequeña embarcación neumática, de apenas cuatro metros de largo, en la que viajaban, completamente extenuados y exhaustos, cuatro inmigrantes irregulares de origen subsahariano. Estos jóvenes mareños fueron los primeros que los atendieron, a pie de playa, hasta que al lugar llegaron los servicios de Emergencias y la Guardia Civil.

Según explicaron los jóvenes, se trataba de cuatro subsaharianos varones, también muy jóvenes, de entre 15 y 20 años, que habían iniciado la aventura de cruzar el Mediterráneo desde Marruecos hacía cuatro días, con una embarcación sólo movida por remos, sin ningún tipo de motor. Los inmigrantes presentaban síntomas de avanzado agotamiento, fatiga y deshidratación, después de una travesía de cuatro días en alta mar.

Sin fuerzas para huir

Al parecer, un buque mercante fue el que dio el primer aviso al Servicio de Vigilancia del Estrecho (SIVE), que depende de la Guardia Civil. A partir de ahí, se montó un dispositivo para localizar la embarcación, que finalmente tomó tierra, aunque los inmigrantes estaban tan cansados que no tuvieron fuerzas ni para huir del lugar, según relataron los testigos que presenciaron la intervención.

Tras recibir las primeras atenciones médicas en la misma arena, fueron trasladados en ambulancia al hospital comarcal de la Axarquía, donde se recuperan. Posteriormente, serán puestos a disposición del Cuerpo de la Policía Nacional, que será quien se encargue de determinar su edad y su país de procedencia. En caso de que sean menores de edad, pasarían a un centro de menores, dependiente de la Junta.