En el campo murciano trabajan 44.599 extranjeros (51,02% del total de contratados). En enero de 2009, el 46,9% de los trabajadores extranjeros se dedicaba a la actividad agrícola. La agricultura es un refugio para muchos desempleados de la construcción y la industria. En las tareas del hogar están empleados 5.056 (5,79%) y los contratados en servicios y construcción han ido disminuyendo debido a la crisis (37,15% actualmente).

Son datos que ofreció ayer en Molina de Segura el director de la Oficina de Extranjería de la Región, Fulgencio Puche durante la conferencia organizada por la Plataforma de la Inmigración de Molina de Segura. Puche alabó el trabajo que realizan las ONG y, particularmente, la labor desempeñada por la Plataforma. Asimismo, restó importancia a los datos que apuntan a un incremento del racismo debido a la crisis. La población murciana «no tiene un sentimiento xenófobo», defendió.

Las jornadas interculturales proseguirán esta tarde, a partir de las 20.00 horas en la plaza de La Cerámica, con una fiesta de la convivencia con la que se persigue fomentar el encuentro y la interculturalidad, según la presidenta de la plataforma, Irene Torregrosa. La Oficina de Atención al Inmigrante de Molina ha atendido durante 2.009 y los primeros cinco meses de 2.010 a casi 7.500 personas. La mitad de esas personas demandaba apoyo para asuntos administrativos, un 20% ha requerido acompañamiento al juzgado en asuntos de malos tratos y visitas al Servicio Regional de Empleo y Formación, y otro 20% ha pedido ser acompañado en asuntos relacionados con la educación.

El 10% restante buscaba ayuda en materia de vivienda y asuntos labores, con un considerable incremento de visitas a sindicatos por denuncias y falta de pago de haberes. Numerosas ONG denuncian que las situaciones de explotación se han disparado a causa de la crisis.