La Fiscalía pidió ayer dieciséis años de cárcel para los tres acusados de un delito de asesinato cometido en 2008 en la zona de Taco (La Laguna). Además, durante el juicio celebrado ayer en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife el Ministerio Público solicitó dos años para Dailo A.N. y Francisco A.O. y uno para Isidro H.M. por intento de robo con violencia.

Los hechos ocurrieron el 1 de noviembre de 2008, cuando, según las conclusiones provisionales de la Fiscalía, Dailo recogió con su coche a Francisco y le propuso ir a robar dinero y droga a un varón. Según el escrito, el conductor entregó un cuchillo a Dailo.

A continuación los jóvenes recogieron a Isidro en su domicilio y después se dirigieron a El Cardonal, donde localizaron a la víctima, Prince, quien subió al coche en el asiento del copiloto de forma voluntaria.

Durante el trayecto comenzó una discusión entre Prince y el conductor, quien le propinó varios puñetazos. Mientras, Francisco agarró a la víctima por el cuello y le colocó el cuchillo que llevaba en el pecho. A la altura de la gasolinera BP de la carretera general de La Cuesta-Taco, Dailo frenó el coche e incitó a Francisco a “pinchar” a Prince, quien recibió una puñalada en el pecho mientras era agarrado por Isidro.

Seguidamente, Dailo bajó del vehículo y, tras abrir la puerta del copiloto, le dio varias patadas a la víctima para sacarlo del coche, momento en que se produjo el fallecimiento. Luego abandonaron el lugar.

Durante la celebración del juicio, Francisco A.O. reconoció haber sido el autor de la puñalada, y afirmó que se encontraba bajo el efecto de drogas que había consumido con anterioridad al momento del suceso. El procesado, que aseguró que “Isidro no hizo nada”, se mostró arrepentido y aseguró que colaboró con la Policía en todo momento, pues reconoció la agresión y condujo a los agentes al lugar donde se deshizo del arma. Esta versión fue confirmada por la Policía.

Dailo A.N. afirmó haber recogido a los otros dos acusados con la intención de “ir a comprar heroína a Santa Clara”, y que por el camino vio “al moreno, que me había engañado. Me dijo que no quería problemas y que lo llevara a su casa, donde tenía la droga”.

El procesado manifestó que se encontraba bajo el efecto del síndrome de abstinencia en el momento de los hechos, estado en el que permanecía cuando fue detenido días más tarde.

Por último, Isidro H.M. durante su declaración afirmó haber presenciado el suceso, pero negó participar en él. Además, el acusado aseguró que le contó lo ocurrido a la Policía de forma voluntaria, una versión confirmada por los agentes.

Al concluir el juicio, los letrados defensores de Francisco y Dailo pidieron una modificación y solicitaron para sus clientes un delito de homicidio y ocho años de prisión.