La ley de inmigración de Arizona caldea el ambiente en EEUU

El Periodico, 01-05-2010

El debate migratorio ha vuelto a abrir la caja de los truenos en EEUU. Es un asunto polémico y, ante la cercanía de las elecciones, a nadie le interesaba que se introdujera en la agenda política. Pero vaya si se ha instalado. Más de 70 ciudades se preparan para celebrar hoy manifestaciones contra la nueva ley de inmigración aprobada por el estado de Arizona, mientras los partidarios de imponer más restricciones a los sin papeles continúan con su escalada verbal.
La sensación que se respira es parecida a la vivida en el 2006, cuando cientos de miles de personas se echaron a las calles para exigir a George Bush una reforma migratoria integral. Tres años después se repiten las convocatorias desde Los Ángeles hasta Nueva York, todas bajo una misma bandera: protestar contra la ley de Arizona, que ya cuenta con dos demandas en los tribunales federales, y al mismo tiempo exigir a Barack Obama que mueva ficha.

BOICOT / El Consejo Nacional de la Raza lamenta que se criminalice a los sin papeles bajo el argumento de la «sospecha razonable», pero al mismo tiempo no tiene claro si debe sumarse a los llamamientos al boicot contra Arizona. El Movimiento por una Reforma Migratoria Justa, por su parte, advirtió ayer que lo de Arizona le da nuevas energías para seguir luchando, y hasta estrellas como Shakira se han sumado a las campañas de apoyo a los inmigrantes con una visita en Phoenix.
El ambiente sigue caldeándose, y poco ayudan declaraciones como las de Duncan Hunter, legislador republicano que aprovechó una cita de los ultraconservadores del Tea Party en San Diego para pedir que los hijos recién nacidos de los inmigrantes sin papeles sean deportados. «Ser estadounidense es algo más que haber cruzado la frontera», dijo entre aplausos de los congregados, olvidando que la Constitución garantiza la nacionalidad a todos los nacidos en territorio estadunidense.

MARCHA ATRÁS / Es más, dijo que es una cuestión de «humanidad» deportar a los bebés junto a sus padres. Desde su oficina intentaron dar marcha atrás asegurando que fue una respuesta en caliente para un asunto de tal complejidad y que no refleja su posición real, pero en todo caso sigue apoyando minar la frontera y considera que la nueva ley aprobada por Arizona es «fantástica».
Por si no había suficiente leña para echar a la hoguera, un grupo de legisladores ha pedido a la Casa Blanca el envío de más efectivos de la Guardia Nacional a la frontera mexicana con autorización para poder disparar en caso de ser atacados. Son representantes de estados fronterizos de ambos partidos que se suman a una petición similar, hace unas semanas, de los republicanos John McCain y Jon Kyl.

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